OTRO DURO GOLPE PARA LA ROYAL NAVY

11.06.2012 11:17

 

Si bien las primeras noticias al respecto fueron publicadas hace semanas, recién en los últimos días los medios anglosajones especializados en temas militares dieron la novedad por cierta.

 

La Royal Navy sufrirá otro duro revés, dado que el Ministerio de Defensa británico decidió que por ahora los buques de guerra británicos no serán equipados con el Cooperative Engagement Capability system (CEC) o Capacidad de Combate Cooperativo.

 

El sistema habría permitido a cualquier buque que estuviera realizando el seguimiento de un avión o un misil volando bajo, transmitir los datos a la nave a la que éste se estaría dirigiendo y eventualmente hasta disparar los misiles antiaéreos de la segunda por control remoto. Un grupo de buques podría así operar como una gran unidad en la que los datos de los sensores serían compartidos en tiempo real.

 

La fusión de los sensores mejora significativamente la coherencia y la continuidad del rastreo de misiles y aviones. Dado que hay muchos factores - además del horizonte - que pueden afectar la detección por radar, este sistema sería de extrema utilidad.

 

Los factores que pueden afectar la detección mediante radar son varios. Uno es el tamaño de la sección transversal del blanco en su relación espacial con el radar. No es fácil detectar un misil volando hacia determinado buque desde ese mismo buque, porque éste se presenta de frente. Es mucho más fácil detectarlo desde un buque al que el misil se le presenta de costado. La superficie expuesta al radar es mayor.

 

Hay otros factores que dificultan la detección por radar: factores atmosféricos, interferencia electrónica, misiles volando muy cerca uno del otro y bloqueos por relieve acrecientan las dificultades.

 

Un  alto jefe de la Royal Navy comentó la noticia diciendo: "La Marina Real sabe que deben hacerse esfuerzos por ahorrar, pero a las fuerzas (armadas británicas) se les pidió hacer más con menos".

 

El CEC iba a compensar la reducción en el número total de destructores del tipo 45 construidos y también iba a equipar a las futuras fragatas tipo 26, aunque algunos especulaban que también se podría dotar con el sistema a al menos algunas naves tipo 23.

 

Por ahora todo parece haber quedado en la nada. Se especula que en el futuro el MoD podría resolver instalar los sistemas al menos en los tipo 45 y las tipo 26. Entre tanto la Royal Navy quedó privada de un sistema que hubiera multiplicado las capacidades antiaéreas de su reducida flota y hubiera acrecentado significativamente su interoperabilidad con la marina estadounidense.