ARDE UCRANIA, ARDE PARÍS

20.03.2023 18:27
 
A hora y media de viaje en automóvil al sur de Bakhmut se encuentra la localidad de Avdiivka, otro de los puntos fuertes en la última línea de defensa sólida de los ucranianos. Ni bien tomaron Stepovo, un asentamiento próximo a la misma, los rusos iniciaron el asalto a la ciudad. La inmediatez les permitió separar a las fuerzas de defensa del grueso de las tropas de Kiev y afianzarse en el este de la población (avia.pro). 
 
Los ucranianos lanzan algunos contraataques débiles y aislados en distintos puntos del frente pero son rechazados por las fuerzas de Putin. Es lo que sucedió en Pohovsky, en la región de Zaporozhye. Las tropas de Kiev simplemente carecen de la capacidad necesaria para penetrar las defensas que Moscú ordenó construir en la retaguardia del frente. Las pequeñas rebeliones o planteamientos contra Zelenski se están volviendo bastante frecuentes entre las unidades militares ucranianas a nivel de batallón y similares. Miembros sobrevivientes de la 46ta Brigada de Asalto Aéreo aseguraron a Zelenski que no seguirán combatiendo hasta que su depuesto comandante, apodado Kupol, sea restablecido en su cargo. Fue destituido por decir la verdad sobre la tremenda situación ucraniana en Bakhmut y por criticar la falta de preparación de los soldados y la escasez de munición. 
 
Tanto en Avdiivka como en Bakhmut las líneas de suministro, sumamente precarias, están bajo el constante bombardeo de la artillería rusa y de su aviación táctica. Para el colmo, los rusos destruyeron un par de grandes depósitos de armas y municiones en la región (Inteligencia británica; avia.pro e Hindustan Times). La ruptura de las líneas de defensa ucranianas en el frente oriental parece ser una cuestión de muy poco tiempo. El embajador polaco ya dijo que "si Ucrania no logra defender su independencia, no tendremos más remedio que entrar en conflicto". El apuro de los polacos por hacerse matar es patético. Es verdad, uno de los países pobres de Europa se está armando hasta los dientes pero comprar armas alocadamente y tener fuerzas armadas aptas para el combate son cuestiones muy distintas. Muchos soldados y mercenarios polacos ya están combatiendo y muriendo en Ucrania. Si Polonia entra en guerra con Rusia, tendrá enfrente a una fuerza temible, una que está logrando desgastar a toda la OTAN. No es todo, la estúpida actitud de la Alianza está uniendo a Rusia, China e Irán. Xi Jinping acaba de arribar a Moscú para reunirse con Putin. Ni hemos mencionado a Corea del Norte y la creciente crisis financiera en los Estados Unidos y en Europa. Macron logró lo que ni Hitler pudo: París arde (y tal vez sólo sea el principio de algo peor). Occidente debe elegir, o pone punto final a la guerra en Ucrania o pone en riesgo su propia supervivencia. "Una paz tiene la naturaleza de una conquista; porque entonces ambas partes son sometidas noblemente y ninguna pierde" (William Shakespeare). ¿Lo aceptará Occidente? Tal vez no.