BOMBARDERO ESTRATÉGICO B-52 STRATOFORTRESS: GENERALIDADES, USO "TÁCTICO" Y ESTRATÉGICO (DECIMOTERCERA PARTE)

27.03.2019 09:42
 
A principios de la década de 1970 era evidente que los soviéticos se detendrían ante nada menos que la paridad militar con los Estados Unidos. La administración del Presidente Nixon, al continuar el compromiso nacional con una tríada nuclear (misiles nucleares lanzados desde tierra, submarinos con armas nucleares y aviones estratégicos con bombas y misiles nucleares), autorizó el desarrollo de un prototipo de bombardero B-1 como reemplazo del B-52. Paralelamente se continuó con la investigación sobre la tecnología de misiles de crucero. La tecnología había desarrollado propulsión, guía y materiales estructurales para un misil de crucero que podría alterar enormemente el perfil del avión bombardero. En junio de 1977, el presidente Carter anunció su intención de no producir el B-1 sino de extender nuevamente la vida útil del B-52 al modificarlo para que lleve un misil de crucero de lanzamiento aéreo de mayor alcance, el ALCM-B.
 
El AGM-86 ALCM (subsonic air-launched cruise missile) es, como lo dice su nombre, un misil de crucero subsónico lanzado desde el aire. Fue desarrollado para aumentar la efectividad y la capacidad de supervivencia del bombardero Stratofortress Boeing B-52H . El misil diluye las fuerzas de un enemigo y complica la defensa aérea de su territorio a tal punto que el sistema de misiles Tor de la Unión Soviética fue diseñado desde el inicio para derribar el AGM-86. El AGM-86 tiene tres variantes principales. La B tiene capacidad de portar cabezas nucleares. Según algunas fuentes habrían sido retirados en 1992 pero otras no hacen la menor alusión a su retiro; es más, muchas fuentes lo citan claramente como "en servicio", con más de 500 en el inventario estadounidense. El AGM-86C deriva del AGM-86B pero cuenta con cabezas explosivas y de fragmentación en lugar de nucleares. El modelo AGM-86D es una versión del anterior con cabeza penetradora para atacar objetivos altamente protegidos y búnkers.
 
Todas las variantes del misil AGM-86 pueden lanzarse a altitudes tanto altas como bajas. El misil despliega sus alas plegadas, las superficies de la cola y la entrada del motor después del lanzamiento. Los misiles AGM-86B/C/D aumentan la flexibilidad en la selección de objetivos. Los misiles AGM-86B pueden ser lanzados al aire en grandes cantidades por la fuerza de los bombarderos. Los bombarderos B-52H transportan seis misiles AGM-86B o AGM-86C en cada uno de los dos pilones montados externamente y ocho internamente en un lanzador giratorio, otorgando al B-52H una capacidad máxima de 20 misiles por avión. Una fuerza enemiga tendría que contraatacar cada uno de los misiles, haciendo que la defensa contra ellos sea costosa y complicada. Las defensas del enemigo se ven obstaculizadas aún más por el pequeño tamaño y la capacidad de vuelo a baja altitud de los misiles, lo que dificulta su detección mediante el radar.
 
Con los cambios asociados a la aviónica, la introducción de los AGM-86 y las adaptaciones asociadas al mismo, resultaron ser la modificación individual más grande jamás realizada en el B-52. A diferencia de los desarrollos de armas anteriores, el ALCM-B capturó lo último en tecnología para permitir un arma pequeña, de largo alcance y altamente precisa. A diferencia de la SRAM, el ALCM-B (la versión de mayor alcance) permite que el avión que lo porta, en muchos casos evite sobrevolar territorio enemigo. El ALCM en general, cambió el rol del B-52. De su función de penetrador pasó a cumplir el rol menos exigente y menos amenazado de ser una plataforma de lanzamiento de misiles. 
 
Artículo relacionado: