EL EJÉRCITO EUROPEO

29.11.2018 10:50
 
El 20 de este mes escribíamos: "No es que no entendamos las razones de los ciudadanos del Reino Unido para haber votado a favor del Brexit. Angela Merkel supo cosechar algunas antipatías y si bien su actitud ante la crisis migratoria que atraviesa Europa le valió el título de Mamá Angela - por sus presuntas políticas de solidaridad con los refugiados víctimas de los conflictos sociales y militares en el Medio Oriente - muchos dicen que ella se quedó con los refugiados que constituían la mano de obra más calificada de esos grupos, dejando el remanente y a los demás refugiados para el resto de Europa."
 
Podríamos decir algo parecido sobre la eventual creación del Ejército Europeo. Cuando Donald Trump pidió a Europa que gaste más en defensa (los roces entre Rusia y Ucrania le darían cierta razón) el presidente francés Emmanuel Macron pateó el tablero y propuso la creación del Ejército Europeo. La Canciller alemana Angela Merkel fue la primera en apoyarlo. Gran Bretaña reafirmó que no sería de la partida.
 
Europa no tiene ni personal capacitado ni el equipamiento necesario para defenderse fuera del marco de la OTAN, tanto menos en el marco del Brexit. Tal vez los británicos harían mejor en quedarse. Fueron ellos los que siempre frenaron las ideas de una fuerza armada exclusiva del viejo continente.
 
¿Que ganarían los súper federalistas europeos si prospera el proyecto? Quieren un estado centralizado con su banco central, recaudación impositiva propia y un ejército propio: la concentración de todo el poder. ¿Teoría conspirativa o realidad? Que juzgue el lector. Podría alegarse que Estados Unidos y Gran Bretaña están haciendo algo parecido aunque con Donald Trump eso parece haber quedado frenado.
 
"Al Nuevo Orden Mundial entraremos inermes con las manos en la nuca, caminando de rodillas y ninguna duda que seremos pobres, dependientes y excluidos", dijo el Coronel y héroe de Malvinas Mohamed Alí Seineldín. Cualquier argentino mínimamente informado sabe que ya estamos inermes, que la pobreza se convirtió en un mal endémico (casi en una pandemia), que dependemos del dinero que nos prestan. No estamos criticando a un gobierno en particular, lo hacemos con nuestra dirigencia política en general. No criticamos las intenciones, evaluamos los resultados, los hechos.