¡REHENES!

26.08.2021 07:20
 
El gobierno británico advirtió de una amenaza terrorista inminente y grave contra la multitud agolpada en torno al aeropuerto de Kabul. La información fue provista a la cadena BBC; funcionarios estadounidenses y de otros países de Occidente la confirmaron. Autoridades estadounidenses instaron a sus ciudadanos en los alrededores del aeropuerto a retirarse y a los que querían llegar al campo de aviación, a no hacerlo. Es claro quien manda, no son los norteamericanos. Los talibanes y sus secuaces del ISIS y Al-Qaeda tienen el control total de Kabul, de todo Afganistán. La amenaza de una ataque contra la multitud que quiere huir del país provendría del grupo terrorista ISIS-K, una escisión de los terroristas del Estado Islámico que actúa sobre Khorasan, una extensa región que incluye Afganistán y Pakistán. 
 
La administración Biden sigue mintiendo descaradamente. Para ellos son sólo unos cientos los ciudadanos que aún no pudieron ser evacuados. Informes de diversas fuentes sostiene que el número es mucho mayor. El Departamento de Estado de los EEUU considera que quienes no llegaron al aeropuerto no quieren salir del país. ¿Y cómo habrían de llegar? Además de la amenaza de un ataque con explosivos hay muchos otros factores que impiden a los extranjeros ir a la zona de evacuación. Los propios norteamericanos delegaron en los talibanes el control de visas y pasaportes. A muchos que intentan huir del país se les rompen sus pasaportes o visas y luego de propinárseles una brutal paliza con látigos, cadenas y/o caños se les indica que regresen por donde vinieron. Otros no quieren salir porque los EEUU no acepta a los familiares de sus ciudadanos. ¿Quién dejaría el país dejando atrás una esposa afgana? Todos se convirtieron en rehenes. Un ex Boina Verde dijo a la cadena Fox News que comparada con la actual situación en Kabul, la crisis de rehenes de Teherán del año 1979 parece "una fiesta de pijamas". 
 
General Kenneth F. McKenzie Jr., comandante del Comando Central de los Estados Unidos, en el aeropuerto de Kabul - Foto tomada el 17 de agosto por el Teniento Primero Mark Andries; USMC
 
El tiempo, claramente, se acaba. Políticos de la oposición y veteranos de guerra ya casi no contiene su furia. Presionan a Biden hasta lo indecible pero por ahora no hay un cambio de actitud del presidente. No hay indicios que permitan suponer que lo vaya a haber. Ayer mencionábamos que el Coronel británico Richard Kemp manifestó que Biden no debería ser destituido sino sometido a una Corte Marcial. Los enemigos de Biden no quieren verlo destituido, quieren para él el más duro de los juicios. El presidente estadounidense se hizo de demasiados enemigos que se encuentran totalmente enardecidos. Conjeturamos que su sonrisa estúpida y sus ojos vidriosos no le servirán de mucho a la hora de rendir cuentas. 
 
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