¿QUÉ PASA CON EL SUBMARINO BRITÁNICO HMS AMBUSH?

Si bien hace ya algún tiempo que circula la versión de que el submarino británico HMS Ambush estaría experimentando algunas dificultades técnicas, los hechos parecen confirmar las sospechas de que el SSN británico realmente tiene problemas y serios. Se sabe que la clase Astute, de la que el HMS Ambush es la segunda (y por ahora la última) unidad en haber entrado en servicio, tiene algunos defectos de diseño que no podrán ser resueltos en las tres primeras unidades de la clase. Aun así lo del HMS Ambush parece ser algo preocupante, no solo para los británicos.

 

El grueso de la información al respecto obviamente no procede de los ingleses sino de los españoles y de los gibraltareños. El hecho es que el HMS Ambush hizo - en algo más de un mes - tres "entradas operativas programadas" en el puerto de Gibraltar. La preocupación no termina allí. El 21 de mayo del corriente año, la Autoridad Portuaria de Gibraltar publicó un aviso anunciando que se realizaría el movimiento de materiales peligrosos en el muelle sur durante los días 22 y 23 de mayo. Esos movimientos fueron realizados por el Ministerio de Defensa británico entre las 9.30 y las 19:30 de ambos días y requirieron que la mencionada Autoridad Portuaria decretara una zona de exclusión de 200 metros alrededor del atraque número 50 y el cierre de la entrada sur del puerto por el tiempo que tuvieron lugar las operaciones. Durante esos dos días se produjo la descarga desde el Ambush de bultos alargados peligrosos, que según algunas fuentes podrían haber sido elementos combustibles del reactor del mencionado submarino nuclear.

 

En su segunda visita el Ambush permaneció en Gibraltar desde el 8 hasta el 15 de junio, volviendo a recalar allí en 29 de junio. Durante la segunda visita el sumergible habría sido reparado en el muelle y fuentes de la propia Armada española expresaron su inquietud en la ante la posibilidad de que se tratase de un fallo en el reactor o en su sistema de refrigeración. El sistema de refrigeración de los reactores de los submarinos nucleares ingleses tiene una larga serie de antecedentes en lo que a desperfectos se refiere. De hecho se sabe que su diseño es por demás defectuoso.

 

Los españoles y gibraltareños tienen razones de sobra para estar preocupados. Ya en mayo del año 2000 el SSN HMS Tireless tuvo que ser retirado del servicio por 12 meses, tiempo que permaneció en Gibraltar, después de habérsele descubierto una fuga radiactiva. Aquel incidente del Tireless supuso el vertido de agua radiactiva y la entrada y reparación de ese submarino en el puerto. Después de eso se produjeron numerosos atraques, con reparaciones y descarga de materiales peligrosos incluidas. En febrero de 2009 se produjo una colisión de los submarinos Vanguard y Triomphant en el Atlántico no lejos de Gibraltar. El propio Ambush tuvo sus primeros problemas durante sus pruebas de mar. Los submarinos nucleares de la Royal Navy siguen siendo fuente de graves preocupaciones para todo el mundo, y no solo (ni siquiera principalmente) por su armamento.