CHINA NO ES SOLAMENTE UN RIESGO MILITAR

24.09.2021 09:05
 
Anteayer escribíamos: "El Presidente de la República Popular China, Xi Jinping, está dejando tambalearse seriamente a la gigante inmobiliaria china Evergrande. No faltan quienes afirman que la precaria situación financiera de la empresa está arrastrando consigo la economía del Gigante Asiático. Opinamos que es al revés. Xi Jinping está intentando destruir todo lo que pueda parecerse al libre mercado en su país, aun a costa de una crisis." 
 
Hoy el Banco Central de China se comprometió a tomar fuertes medidas contra las actividades "ilegales" de comercio de criptomonedas. Se prohibirá a las instituciones financieras y otras facilitar el comercio de criptomonedas. Ya antes de la medida tomada hoy, había quienes señalaban que Xi Jinping estaba comenzando a usar la economía como una especia de arma y como un instrumento de control. Para el comunismo la acumulación de poder es más importante que la propia economía. El Partido Comunista Chino lo está demostrando. Con sus medidas hizo caer el valor de algunas monedas digitales.
 
La precaria situación de Evergrande tuvo repercusiones en los Estados Unidos. Ahí grandes inversores se hacen de paquetes de acciones que luego revenden a inversores más pequeños. El grueso del riesgo recae sobre los inversores menores. Las acciones tienen un valor difícil de determinar y las reglas del juego pueden cambiar en cualquier momento. Habrá que ver si los pequeños apostadores norteamericanos aprendieron la lección, es posible que todavía no.
 
El control a través de la economía no es privativo de los chinos. La izquierda norteamericana está queriendo hacer lo mismo. La administración Biden quiere obligar a los bancos a proporcionar anualmente información de toda transacción de 600 dólares o más a la entidad tributaria federal IRS. Eso incluiría a la mayoría de los clientes bancarios y es visto como una intromisión en la privacidad de los ciudadanos estadounidenses. También sería una enorme carga económica y laboral para el sistema bancario. Es la clase de acción irracional, fanática y extrema que uno espera de Joe Biden. Los Estados Unidos se están deteriorando pero no son China. Biden está jugando con fuego. Veremos cuánto tarda en quemarse.