EL PENTÁGONO ORDENÓ QUE TODOS LOS F-35 PERMANEZCAN EN TIERRA

22.02.2013 19:34

 

El Pentágono ordenó que todos los F-35 pertenecientes a las tres variantes del Joint Strike Fighter permanezcan en tierra mientras se investiga la causa de una rajadura descubierta el martes 19 en una paleta del motor de un F-35A, o sea en la variante convencional. Está suspensión de vuelos es la segunda en menos de dos meses.

 

El problema más reciente (rajadura de la paleta) se produjo apenas días después de haberse reanudado los vuelos de la variante F-35B que permaneció en tierra durante casi un mes por la falla en una línea hidráulica. Se trató de una línea hidráulica, que en lugar del fluido hidráulico tradicional, utiliza combustible como forma de reducir el peso.

Todavía no se sabe si el problema de la paleta es un caso puntual o si afecta a toda la flota, de modo que se dio la orden de cancelar todos los vuelos.

 

Los ingenieros quitaron la paleta que presentaba el problema y la misma fue enviada a las instalaciones de Pratt & Whitney en Middletown, Connecticut, para una evaluación más minuciosa que permita determinar el origen de la grieta. Se espera una primera evaluación para la próxima semana.

 

Este es un nuevo revés para el programa del JSF que es acechado por los recortes del presupuesto de defensa estadounidense y por sus constantes retrasos y costos crecientes. Hace apenas días los ejecutivos de la firma que lleva adelante el programa afirmaron que, en el informe del Director de Pruebas y Evaluación Operacional del Pentágono, “no hay motivos para desistir”. Fue una aclaración poco tranquilizadora.

 

Mientras Canadá, Italia y Australia redujeron o analizan reducir el número de aeronaves a adquirir, el nuevo problema podría precipitar a alguno de estos países a tomar la decisión de restringir sus compras de aparatos.

 

Sin embargo el país más afectado por esta nueva dificultad podría ser Gran Bretaña. Al ya mencionado período de casi un mes en tierra de la variante F-35B, se le suma ahora la cancelación de los vuelos de las tres variantes. Gran Bretaña optó por configurar su portaaviones Queen Elizabeth para operar aparatos STOVL (de despegue corto y aterrizaje vertical). Su única opción es por ahora el JSF F-35B Lightning II. Mientras la construcción de los dos portaaviones clase Queen Elizabeth avanza a buen ritmo y el Queen Elizabeth ya está tomando forma, el avión que deberán embarcar estas naves comienza a generar dudas respecto al futuro de la aviación embarcada británica.