LA ESTRATEGIA EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL - DECIMOSEXTA PARTE: LA CONTRAOFENSIVA ALIADA EN EL PACÍFICO (continuación VI)

29.07.2013 16:27

 

Son muchos quienes atribuyen la derrota japonesa en Midway al Vicealmirante Chuichi Nagumo. Debido a errores tácticos y/o a hechos providenciales, perdió los cuatro portaaviones capitales que participaron en la Batalla de Midway. No es el objetivo de este trabajo analizar cuestiones tácticas. Sí queremos señalar circunstancias y errores estratégicos que llevaron al fracaso japonés en la batalla en torno a Midway y que, como mínimo, atenúan la responsabilidad de Nagumo por lo acontecido durante la misma.

 

Ya dijimos que el plan nipón se basaba en varios supuestos erróneos, que los submarinos no lograron detectar la salida de la flota estadounidense de Pearl Harbor y que un acorazado detectó mensajes que evidenciaban la presencia en la zona de una importante fuerza naval enemiga, pero que Nagumo no fue alertado de ello. Además, el plan nipón había sido desnudado por los criptógrafos estadounidenses. Pero independientemente de todo esto, el plan japonés tenía serias fallas a nivel estratégico.

 

En la batalla del Mar del Coral, los japoneses habían perdido el portaaviones ligero Shoho y el moderno Shokaku de 32.105 toneladas (a plena carga) había sido averiado. Por su parte el Zuikaku había perdido muchos aviones y pilotos. Ninguno de los dos últimos pudo participar en la Batalla de Midway. Cabe preguntarse si fue prudente intentar tomar Port Moresby - y otros objetivos asociados - semanas antes del ataque a Midway. A eso se le debe sumar la dispersión de medios causada por el plan estratégico de Yamamoto.

 

El ataque a las Aleutianas (algunos cuestionan la afirmación de que haya sido un mero ataque de distracción) insumió muchos medios navales. De ese ataque participaron los portaaviones Ryujo y Junyo, dos acorazados, dos cruceros pesados, tres cruceros ligeros, cuatro destructores y buques de transporte y abastecimiento. Por su parte Yamamoto planeaba atacar a la flota estadounidense que concurriría a Midway con acorazados, que tampoco engrosaron las fuerzas de Nagumo.

 

El vicealmirante nipón tuvo que atacar Midway y al mismo tiempo enfrentar a la flota norteamericana. Nagumo ordenó cambiar las armas de los aviones destinados a atacar a la flota estadounidense, porque había sido informado que la base de Midway aún podría reabastecer a aviones que pudieran provenir de Hawái. Si cometió algún error táctico, lo hizo forzado por los errores del plan estratégico. Esos no pueden ser atribuidos a él.