LA ROYAL NAVY ESTÁ EN LA MIRA DE PUTIN

14.09.2024 10:46
 
Los estadounidenses y británicos, especialmente estos últimos, consideraron dar a Kiev el permiso de usar misiles de largo alcance para atacar el interior ruso. Moscú hubiera quedado - al menos teóricamente - al alcance de los mismos. Zelensky habló abiertamente de atacar el Kremlin. La reacción de Putin fue salir a decir por televisión que si algo de eso sucedía, la OTAN estaría entrando en guerra con Rusia. Su portavoz no oficial, Medvedev, expresó que Gran Bretaña era un país que se estaba hundiendo y que si era necesario acelerar el proceso, su país podía hacerlo mediante el uso de misiles hipersónicos, capaces de portar ojivas nucleares. De momento Washington y Londres recularon. Es más, estos días el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, estuvo en el este de Europa. Un europarlamentario polaco, Grzegorz Braunle, dijo públicamente que se largara, que su país estaba harto de pelear una guerra norteamericana: "No queremos que el pueblo polaco pague y muera por sus guerras". ¿Es una advertencia hecha en solitario o Europa está comenzando a reaccionar? No es lo mismo apoyar una guerra que quedar envuelto en ella, pero los polacos ya son parte de la misma.
 
Entre tanto las tropas de Putin retomaron la iniciativa en Kursk y avanzan aún más velozmente en el Frente del Este. Los soldados ucranianos se retiran, casi desbandándose, y hasta se habla del fusilamiento de agentes británicos por parte de esos efectivos. También se habla de un asalto ucraniano a Crimea, los preparativos se estarían haciendo para el año próximo pero para entonces ya podría ser muy tarde. Mucho depende del resultado de las elecciones norteamericanas. Sea como fuere, el Kremlin podría ordenar el bombardeo de las represas del Dniéper y hundir a las fuerzas enemigas antes de que estas empiecen el asalto. A menos que se pierda todo sentido común, la suerte de Ucrania parece estar echada. El propio Putin está viendo acotada su libertad de acción, los halcones rusos le exigen más firmeza. Créase o no, el líder ruso es moderado en comparación con algunos funcionarios y militares.
 
Portaaviones HMS Prince of Wales fotografiado en septiembre del 2019. Este archivo tiene licencia de Open Government License versión 1.0 (OGL v1.0). nationalarchives.gov.uk/doc/open-government-licence/version/1/
 
Cuando comenzó la guerra se hablaba de que la misma seria financiada con los recursos naturales de una Rusia derrotada. Después la garantía pasaron a ser las tierras fértiles de Ucrania. Buena parte de esas tierras podrían quedar en manos de Rusia y si Donald Trump gana las elecciones de noviembre, podría buscar una salida negociada con Moscú. La ventana de oportunidad para quienes ganarían dinero con un avance de las fuerzas de Kiev se está cerrando. Kursk está volviendo a manos de las tropas de Putin que podrían llegar hasta Odessa y cerrar a Ucrania toda salida al mar. De aquí en más las medidas occidentales podrían ser desesperadas. Putin advirtió que no está jugando y que cualquier ataque en profundidad conllevaría una durísima represalia. ¿Deberá demostrar que está hablando seriamente? La Marina Real británica es un objetivo posible, aún más, probable. Gran Bretaña se hundiría - literalmente. Es exactamente lo que aseguró Medvedev.