LAS PUERTAS DEL INFIERNO: LA MISTERIOSA RENUNCIA DE BENEDICTO XVI

09.01.2023 11:25
 
"...Después de haber examinado ante Dios reiteradamente mi conciencia, he llegado a la certeza de que, por la edad avanzada, ya no tengo fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino. Soy muy consciente de que este ministerio, por su naturaleza espiritual, debe ser llevado a cabo no únicamente con obras y palabras, sino también y en no menor grado sufriendo y rezando. Sin embargo, en el mundo de hoy, sujeto a rápidas transformaciones y sacudido por cuestiones de gran relieve para la vida de la fe, para gobernar la barca de san Pedro y anunciar el Evangelio, es necesario también el vigor tanto del cuerpo como del espíritu, vigor que, en los últimos meses, ha disminuido en mí de tal forma que he de reconocer mi incapacidad para ejercer bien el ministerio que me fue encomendado. Por esto, siendo muy consciente de la seriedad de este acto, con plena libertad, declaro que renuncio al ministerio de Obispo de Roma, Sucesor de San Pedro, que me fue confiado por medio de los Cardenales el 19 de abril de 2005, de forma que, desde el 28 de febrero de 2013, a las 20.00 horas, la sede de Roma, la sede de San Pedro, quedará vacante y deberá ser convocado, por medio de quien tiene competencias, el cónclave para la elección del nuevo Sumo Pontífice." (vatican.va)
 
El párrafo de arriba es la parte más sustancial del texto de la renuncia del Papa Benedicto XVI, Pontífice que apenas ocho años antes, en su primera homilía como tal, decía: "Rueguen por mí para que no huya por miedo a los lobos." Habían pasado siete siglos desde la renuncia de Celestino V, el último precedente de una dimisión del Vicario de Cristo. ¿Quiénes eran los lobos a los que temía Benedicto? ¿Las razones que dio para su renuncia son creíbles? Alegó la falta de "vigor del cuerpo como del espíritu" pero vivió diez años más. Sus últimas palabras fueron, según consta en vaticannews.va: "¡Señor, te amo!". 
 
"Esta fue la tercera vez que Jesús se manifestó a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos. 15.Cuando terminaron de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?» Contestó: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Jesús le dijo: «Apacienta mis corderos.» 16.Le preguntó por segunda vez: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas?» Pedro volvió a contestar: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Jesús le dijo: «Cuida de mis ovejas.» 17.Insistió Jesús por tercera vez: «Simón Pedro, hijo de Juan, ¿me quieres?» Pedro se puso triste al ver que Jesús le preguntaba por tercera vez si lo quería y le contestó: «Señor, tú lo sabes todo, tú sabes que te quiero.» Entonces Jesús le dijo: «Apacienta mis ovejas.» 18.En verdad, cuando eras joven, tú mismo te ponías el cinturón e ibas a donde querías. Pero cuando llegues a viejo, abrirás los brazos y otro te amarrará la cintura y te llevará a donde no quieras.» 19." del Evangelio según San Juan, 21 - Biblia Católica Online
 
Tres veces había traicionado Pedro a Jesús negándolo, tres veces reafirmó su amor. ¿Benedicto sintió remordimiento por su renuncia? Pocos católicos se atreven a cuestionar la bondad de Joseph Ratzinger y hacen bien. Después de su renuncia los templos católicos fueron cerrados; los experimentos con vacunas que contravenían el Código de ética médica de Núremberg serían proclamados "un acto de amor". "Vacunarse, con vacunas autorizadas por las autoridades competentes, es un acto de amor." (Papa Francisco - vaticannews.com). ¿Cómo algo compulsivo puede ser un acto de amor?. Después de Benedicto, el Vaticano entregó a los católicos chinos al Partido Comunista Chino, mediante un pacto negociado por el ex Cardenal Arzobispo de Washington, Theodore McCarrick. Después de Benedicto cualquier opción sexual o "de género" es válida, tal como lo sostiene el sacerdote jesuita James Martin, cuyo trabajo fue "reconocido" por el Papa Francisco. Después de Benedicto los obispos debaten si dar la Comunión a los políticos que apoyan e incluso fomentan el aborto es bueno o malo. Francisco - que admite claramente que el aborto es un asesinato - afirma que "el problema [de la Comunión] no es teológico, es pastoral".
 
¿De qué lobos hablaba Benedicto XVI? ¿Huyó por miedo a ellos? ¿Por qué el sacerdote jesuita Malachi Martin predijo que un Papa sería obligado a renunciar? ¿Por qué el mayordomo de Ratzinger robó documentos secretos? ¿Por qué en las semanas previas a su renuncia, los cajeros automáticos de la ciudad-estado dejaron de funcionar? ¿Por qué los documentos privados de Benedicto están siendo quemados? Son muchas preguntas y tras su muerte comienzan a aparecer algunas respuestas. Por ahora son pocas pero extremadamente inquietantes. (Continuará)
 
Recomendamos fuertemente leer todos los artículos de esta serie, sacados del contexto pueden ser malinterpretados. Puede acceder a cada uno de los artículos anteriores desde nuestra página de inicio. Si el artículo le pareció apropiado, por favor, compártalo. ¡Gracias!