PRIGOZHIN: CAYÓ BAKHMUT - NUBE RADIACTIVA SOBRE POLONIA

20.05.2023 10:20
 
Hace algunos días, uno o dos misiles rusos hicieron volar por los aires un gigantesco depósito de municiones en Ucrania. Entre otro material acumulado allí, había municiones de uranio empobrecido enviadas por Gran Bretaña a Kiev. Los militares del Kremlin se ocuparon de que el ataque tuviera lugar cuando el viento soplaba hacia el oeste, hacia la belicosa Polonia que - según los rusos - acusa recibo de un incremento de la radiación en su atmósfera. Putin dio una muestra de que no está jugando. El pueblo polaco, que ya se queja por la "ucranianización" de su país, poco y nada quiere saber de la guerra. El gobierno polaco sí. Quienes parecen haber comprendido el aviso fueron los alemanes que ante el visto bueno de Washington a terceros países para el envío de aparatos F-16 a Kiev, dijeron claramente que no tenían aviones de combate disponibles en cantidad suficiente. Claro, con el errático comportamiento de Olaf Scholz nada debe ser dado por sentado pero la postura inicial de Berlin es clara. En cualquiera de los casos pasarán largos meses hasta que haya algún piloto ucraniano preparado para volar los F-16. Por ahora los EEUU no los enviarán, los británicos no los tienen; Alemania tampoco y otros países todavía no se pronunciaron. La nube radiactiva que presuntamente cubre Polonia, no sería de una gravedad extrema pero tampoco es algo que deba ser ignorado.
 
Los intentos de la administración Biden de crear nuevos frentes de combate en Moldavia; Transnistria; Osetia del Sur; Azerbaiyán y otros, de momento fracasaron. La continuidad del propio apoyo estadounidense a Zelenski está en cuestión. Los demócratas no lograron que los republicanos aprobaran un incremento en el techo de la deuda pública norteamericana, los últimos ponen una condición: una fuerte reducción del gasto federal. Lo que pueden enviar los británicos es de dudoso valor militar; los misiles de crucero aerolanzables Storm Shadow caen fácilmente por acción de la artillería antiaérea rusa. Según fuentes rusas, los Storm Shadow tienen un retraso tecnológico de diez años. Otro aseguran que los misiles y los drones están ganando importancia frente a los aviones de combate tripulados y su armamento. Por otra parte Londres no cuenta con bombarderos estratégicos. Sus Avro Vulcan tuvieron un papel tan deslucido durante la Guerra de Malvinas que ni siquiera sobrevivieron hasta la caída del Muro de Berlín. Moscú cuenta con bombarderos en cantidades más que suficientes y comenzó a usarlos con regularidad.
 
Bombardero estratégico Avro vulcan de la RAF
 
Cayó Bakhmut, así los asegura el fundador del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, así lo reproducen medios rusos y serbios. La información es creíble, en los últimos días Prigozhin contó con el apoyo de paracaidistas rusos y de combatientes chechenos. No quita que los ucranianos no intenten contragolpear pero estarán en seria desventaja. La OTAN y sus socios deberán elegir: o siguen una guerra que terminará con la cultura occidental como la conocemos o ayudan a Zelenski a negociar una paz honrosa. Es difícil hacer predicciones sobre qué sucederá. En los EEUU gobierna un Joe Biden cuyo estado de salud asusta. En la cumbre del G7, en Japón, se lo vio muy envejecido y confundido. Volvió a tropezar en unas escaleras y faltó poco para que cayera al suelo. Fue casi una alegoría del poder hegemónico estadounidense. El último tuvo alguna bondad mientras duró pero los múltiples errores y abusos amenazan con precipitar su final. El mundo difícilmente vuelva a ser como lo conocimos. O la OTAN se sienta a negociar una paz difícil, dolorosa para todos (en especial para los ucranianos que tanta sangre noble derramaron) o Bakhmut podrá ser considerada su tumba. Oremos por que prime la cordura.
 

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