RESPUESTA A LA AYUDA ESTADOUNIDENSE A ZELENSKY: LOS RUSOS COMENZARÁN A ARMAR A SUS FUERZAS CON LOS MODERNÍSIMOS MISILES S-500

27.04.2024 11:50
Europa vació casi por completo sus arsenales y los Estados Unidos no están mucho mejor. Muchos analistas opinan que esa es la razón por la cual los norteamericanos no apoyaron a Netanyahu contra Irán. Simplemente no están en condiciones de abrir otro frente de batalla. La última ayuda financiera votada para Ucrania es en realidad un préstamo. Se estima que casi la mitad de ese dinero irá directamente a la industria bélica estadounidense que debe reponer el material destruido por los rusos. Por ahora la ayuda en lo referente a armas se traduce en misiles de largo alcance (unos 320 kilómetros). Putin se verá obligado a seguir avanzando. Es lo que sucede de momento. Los rusos avanzan en todo el frente oriental, incluida la parte norte, frente a Kharkiv. La fuerza aérea rusa y los misiles de de Moscú destruyen mercenarios, material militar, fabricas y centrales eléctricas. Las pequeñas ciudades ucranianas y las aldeas caen una tras otra. A los ATACAMS de 320 kilómetros de alcance, los rusos opondrán sus sistemas S-500 que comenzarán a incorporar a sus fuerzas armadas este año. Se trata del sistema antiaéreo más poderoso sobre la tierra. Los S-500 podrán no estar totalmente listos, pero los rusos no tardan mucho en adecuar su armamento a las condiciones de combate. Capitalizan su experiencia en batalla con mucha velocidad. Su industri militar trabaja día y noche. 
 
La moral de las tropas ucranianas cae rápidamente. Brigadas enteras se retiran de la zona de combate y son muchos los soldados que se rinden ante los rusos. Zelensky lo sabe y obra en consecuencia. El ex comandante ucraniano, el general Zaluzhny, fue arrestado y estaría en prisión domiciliaria. El temor a un golpe interno crece a medida que la situación en el campo de batalla se complica. El descontento de los militares es mayúsculo. La mayoría de los analistas opina que la última ayuda estadounidense podría alargar la guerra pero no cambiar su curso. Nosotros creemos que, por el contrario, Putin podría optar por acelerar el avance ruso para capitalizar los logros y establecer cuanto antes una zona de seguridad más ancha, necesaria ante el mayor alcance de los últimos misiles estadounidenses que se hicieron llegar a Kiev. Fianlizada la Guerra Fría, Gorbachev habría recibido la promesa de que la OTAN no avanzaría una pulgada más hacia el este. Basta con tomar el mapa y ver dónde se encuentra en estos momentos: en el corazón del territorio ucraniano. Hay un detalle, mientras terminada la Guerra Fría, la OTAN optó por desarmarse, los rusos dejaron en reserva decenas de miles de tanques y podrían llegar a poner en condiciones de uso, según el medio Avia.pro, hasta 30.000 carros de combate. Obviamente no de un día para el otro, pero sus reservas se los permitirían. Son más de aquellos con los que cuenta toda Europa. 
 
¿Recuerda al comandante de la armada alemana que dijo que no había que empujar a Rusia a los brazos de China? Nadie lo escuchó. China acaba de apoyar decididamente a Rusia y ambos países están tomando acciones en conjunto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El panorama se complica aún más con la sociedad que Rusia debió establecer con Irán para obtener al menos drones, sino también misiles. Irán a cambio está recibiendo modernos aviones de combate rusos. Eso complica la situación de Israel, que inició una guerra que todavía no puede ganar. Por el contrario, la situación se vuelve cada vez más candente y crítica. Es muy probable que si Netanyahu cae, tarde o temprano vaya preso por causas anteriores al comienzo de la guerra, por lo cual el hombre se siente obligado a seguir combatiendo y atacando. La situación en Medio Oriente es extremadamente delicada. Recordemos que la propia Rusia tiene tropas en Siria y parece decidida apoyar a Irán en lo que fuera necesario. Entretanto, decenas de miles de palestinos y otros habitantes de la región mueren, ya sea por las bombas o por el hambre. Para muchos el mundo se ha tornado en un lugar sumamente inhóspito.
 
Europa vació casi por completo sus arsenales y los Estados Unidos no están mucho mejor. Muchos analistas opinan que esa es la razón por la cual los norteamericanos no apoyaron a Netanyahu contra Irán. Simplemente no están en condiciones de abrir otro frente de batalla. La última ayuda financiera votada para Ucrania es en realidad un préstamo. Se estima que casi la mitad de ese dinero irá directamente a la industria bélica estadounidense que debe reponer el material destruido por los rusos. Por ahora la ayuda en lo referente a armas se traduce en misiles de largo alcance (unos 320 kilómetros). Putin se verá obligado a seguir avanzando. Es lo que sucede de momento. Los rusos avanzan en todo el frente oriental, incluida la parte norte, frente a Kharkiv. La fuerza aérea rusa y los misiles de Moscú destruyen mercenarios, material militar, fabricas y centrales eléctricas. Las pequeñas ciudades y aldeas ucranianas caen una tras otra. A los ATACAMS de 320 kilómetros de alcance, los rusos opondrán sus sistemas S-500 que comenzarán a incorporar a sus fuerzas armadas este año. Se trata del sistema antiaéreo más poderoso sobre la tierra. Los S-500 podrán no estar totalmente listos, pero los rusos no tardan mucho en adecuar su armamento a las condiciones de combate. Capitalizan su experiencia en batalla con mucha velocidad. Su industria militar trabaja día y noche. 
 
La moral de las tropas ucranianas cae rápidamente. Brigadas enteras se retiran de la zona de combate y son muchos los soldados que se rinden ante los rusos. Zelensky lo sabe y obra en consecuencia. El ex comandante ucraniano, el general Zaluzhny, fue arrestado y estaría en prisión domiciliaria. El temor a un golpe interno crece a medida que la situación en el campo de batalla se complica. El descontento de los militares es mayúsculo. La mayoría de los analistas opina que la última ayuda estadounidense podría alargar la guerra pero no cambiar su curso. Nosotros creemos que, por el contrario, Putin podría optar por acelerar el avance ruso para capitalizar los logros y establecer cuanto antes una zona de seguridad más ancha, necesaria ante el mayor alcance de los últimos misiles estadounidenses que se hicieron llegar a Kiev. Finalizada la Guerra Fría, Gorbachev habría recibido la promesa de que la OTAN no avanzaría una pulgada más hacia el este. Basta con tomar el mapa y ver dónde se encuentra en estos momentos: en el corazón del territorio ucraniano. Hay un detalle, mientras terminada la Guerra Fría, la OTAN optó por desarmarse, los rusos dejaron en reserva decenas de miles de tanques y podrían llegar a poner en condiciones de uso, según el medio Avia.pro, hasta 30.000 carros de combate. Obviamente no de un día para el otro, pero sus reservas se los permitirían. Son más de aquellos con los que cuenta toda Europa. 
 
Imagen de un sistema S-500 tomada durante un lanzamiento realizado el 20 de julio del 2021 - Imagen: mil.ru
 
 
¿Recuerda al comandante de la armada alemana que dijo que no había que empujar a Rusia a los brazos de China? Nadie lo escuchó. China acaba de apoyar decididamente a Rusia y ambos países están tomando acciones en conjunto en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El panorama se complica aún más con la sociedad que Rusia debió establecer con Irán para obtener al menos drones, si no también misiles. Irán a cambio está recibiendo modernos aviones de combate rusos. Eso complica la situación de Israel, que inició una guerra que todavía no puede ganar. Por el contrario, la situación se vuelve cada vez más candente y crítica. Es muy probable que si Netanyahu cae, tarde o temprano vaya preso por causas anteriores al comienzo de la guerra, por lo cual el hombre se siente obligado a seguir combatiendo y atacando. La situación en Medio Oriente es extremadamente delicada. Recordemos que la propia Rusia tiene tropas en Siria y parece decidida apoyar a Irán en lo que fuera necesario. Entretanto, decenas de miles de palestinos y otros habitantes de la región mueren, ya sea por las bombas o por el hambre. Para muchos el mundo se ha tornado en un lugar sumamente inhóspito.