UN DESTRUCTOR TYPE 45 BRITÁNICO Y UN DESPLIEGUE LLAMATIVAMENTE BREVE

06.12.2018 08:07
 
En noviembre del año pasado el destructor Type 45 HMS Diamond de la Marina Real británica debió abandonar un despliegue en el Golfo Pérsico que debió durar nueve meses a sólo dos de haber permanecido en la región. Los problemas que obligaron a un regreso prematuro fueron los que aquejan a todos los tipo 45, los de propulsión. Si bien algunos desmintieron este hecho y lo atribuyeron a un problema de propulsión diferente al de los del conjunto de la clase, otros hacen una afirmación un tanto diferente: el HMS Diamond habría sido el primer destructor de su tipo en haber sido modificado para resolver el problema que se origina en la planta de poder de los buques antiaéreos británicos y al parecer la corrección no habría funcionado como debería.
 
Ocho meses más tarde - a mediados de julio del corriente año - informábamos que el HMS Diamond había sido reparado nuevamente y que el problema se repitió: el HMS Diamond tuvo que volver a puerto "guiado" por tres remolcadores. Hay quienes intentaron desmentir el hecho de la falla pero también hubo testigos que afirmaron que al momento del "guiado" el sistema de propulsión de la nave estaban apagado, es decir habría fallado. 
 
A fines de septiembre el HMS Diamond partió hacia el Mediterráneo donde brindaría - según el propio sitio oficial de la Royal Navy - "tranquilidad a los aliados de la región durante todo el otoño". Unos 54 días más tarde ya estaba de regreso en Gran Bretaña. Quien conoce la duración de los despliegues de la Marina Real, sabe que este fue extremadamente breve.
 
Es difícil afirmarlo con certeza pero dados los antecedentes cabe preguntarse si el HMS Diamond hizo tan solo una breve travesía de prueba o si, peor aún, en el trayecto se le descubrieron nuevos problemas de propulsión. Sea como fuere, la misión de llevar tranquilidad a los aliados del Reino Unido no duró mucho.