LA ARMADA ARGENTINA INCORPORARÁ CUATRO BUQUES DE ORIGEN RUSO

05.12.2014 03:49
 
El Ministerio de Defensa, fuentes oficiales de la Armada Argentina, medios argentinos especializados y las versiones digitales ("on line") de diversos medios nacionales generales acaban de confirmar una noticia largamente esperada: ayer se firmó "un convenio para concretar la compra de cuatro Remolcadores Polares Clase “NEFTEGAZ” de origen ruso. El costo de su adquisición es de 8.167.500 USD (los cuatro)."
 
Los gigantescos remolcadores de 2.723 toneladas "estarían arribando al país a mediados del 2015, y reemplazarán a unidades que a lo largo de los últimos años se fueron desafectando por el tiempo de uso, brindando mayor seguridad a la navegación y siendo más económicos por ser más modernos." 
 
El comunicado del Ministerio de Defensa argentino continúa diciendo que "la rúbrica realizada con una empresa estatal rusa permitirá la incorporación de remolcadores aptos para innumerables tareas del Servicio Naval, incluso en aguas antárticas, como Búsqueda y Rescate en el área marítima de responsabilidad SAR (14 millones de km2), Remolque y Salvamento, Patrullaje hasta las 350 millas náuticas y Control de los Espacios Marítimos, Apoyo a la Comunidad con atención sanitaria y Apoyo a las Ciencias." 
 
La Armada Argentina no ha incorporado ningún buque desde el año 1999, cuando fue recibido el buque logístico ARA "Patagonia", de origen francés. Si bien dede la oposición hubo algunas críticas en el sentido que las naves habrían tenido mucho uso intensivo, no podemos negar que el potencial de navegar en aguas antárticas es una característica que les permitirá complementar las tareas del rompehielos ARA "Almirante Irízar" una vez que el mismo regrese al servicio.
 
Si bien algunos especialistas hicieron notar que la velocidad de estos buques los hace poco aptos para el patrullaje, también es cierto que eso se puede compensar dotándolos de capacidades para operar con lanchas semirrígidas y/o helicópteros ligeros. Se especula que estos buques serán dotados de armamento, al menos armamento ligero, lo que tiene sentido habida cuenta de que los comunicados oficiales hablan de "tareas de patrullaje" y de que no dejarán de ser buques auxiliares de una marina de guerra. Sería interesante que se los dotara de lanzadores de misiles antiaéreos Bofors RBS-70.
 
No podemos dejar de hacer un análisis respecto al orígen ruso de estos buques construidos en Polonia por encargo de la que por entonces era la Unión Soviética. Ahora son adquiridos en un momento en que se estima que Gran Bretaña vetó o vetaría la venta de aviones Gripen a Argentina, en caso de que nuestro país quisiera adquirirlos. Precisamente estos días se especulaba que Argentina podría decidir comprar aeronaves de combate de origen chino o ruso. Como antecedente podemos nombrar la adquisición  - en el año 2010 - de dos helicópteros Mi-171E de fabricación rusa para la Fuerza Aérea Argentina. También el Ejército Argentino tiene un pequeño número de blindados de origen chino. La estrategia de Gran Bretaña de trabar la compra por parte Argentina de material militar de occidente terminará siendo contraproducente para la OTAN y los Estados Unidos de Norteamérica. Nuestro país siempre tuvo armas de origen occidental, ahora se ve empujado a comprar armas de otro origen. La política británica podría convertirse en un dolor de cabeza para los EEUU y Europa Occidental.  
 
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