CRECE EL RIESGO DE UN SEGUNDO CONFLICTO ARMADO EN EUROPA

12.12.2022 15:56
 
Ayer, tras ocho oleadas de misiles, toda las centrales termoeléctricas e hidroeléctricas ucranianas sufrieron algún tipo de daños. Hoy lunes los rusos siguen atacando con fuego de artillería y de su aviación táctica. Además del frente oriental propiamente dicho, la zona de Kharkiv también fue martillada por fuego de piezas de artillería, en este caso por piezas autopropulsadas Akatsiya. No tenemos mayores detalles de la situación en el sur. La guerra sigue escalando. Mientras los EEUU siguen fogoneando el conflicto, toda Europa está en un peligro creciente de quedar envuelta por el mismo. Los rusos siguen reforzando su presencia en Bielorrusia. Desde ahí podrían atacar Kiev o simplemente cortar las líneas de suministro ucranianas. El Kremlin dejó claro que su intención es desgastar a los hombres de Zelensky y de momento es exactamente lo que está haciendo. En caso de un colapso repentino de los ucranianos - por ahora sólo está a punto de producirse en la zona de Bakhmut - Putin podría lanzar un ataque a gran escala pero eso no parece ser la prioridad en este momento. Encontrándose Europa muy escasa de combustibles y Ucrania casi sin electricidad, no hace falta estar aclarando a quién le juega a favor el invierno. Es por eso que el autócrata ruso no muestra mucho apuro.
 
2S3 Akatsiya en San Petersburo, Rusia - Foto: Dmitry A. Mottl - Este archivo tiene licencia de creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/deed.es (la imagen original ha sido redimensionada)
 
Por una cuestión de escasez de munición occidental, los rusos disparan diez veces más proyectiles de artillería que los efectivos de Kiev. El desgaste buscado por los rusos ya se hace sentir fuertemente. Las amenazas de la OTAN de una guerra total no tienen sentido, la Alianza llevaría las de perder. De todos modos, Occidente dio sobradas muestras de irracionalidad. De hecho la crisis serbio-kosovar está ganando en intensidad, lo que algunos analistas ven como un castigo europeo a Belgrado por su negativa de apoyar las sanciones contra Moscú. Se genera así el riesgo de una segunda guerra en el Viejo Continente, en los tan inestables Balcanes. Es difícil ver cómo eso podría serle útil a los europeos en general pero sí tendría sentido para algunos personajes siniestros de Bruselas.
 
Artículo relacionado: