EL 48% DE LOS CONTRATOS DEL SECTOR DE DEFENSA BRITÁNICO ESTÁN EN MANOS DE UNA SOLA EMPRESA

11.06.2013 16:08

 

Presionado por hacer cada vez más con cada vez menos dinero, el Ministerio de Defensa británico busca bajar costos. La receta para lograrlo es tan sencilla que sólo cabe preguntarse por qué no se usó antes. El actual Ministro de Defensa inglés, Philip Hammond, descubrió algo que sus predecesores en el cargo no notaron. El problema es tan obvio que GEOESTRATEGIA ya llamó la atención sobre el mismo en varias oportunidades.

 

En nuestra nota del día 5 de este mes sobre los nuevos blindados adquiridos para los ingenieros del Ejército Británico, expresábamos lo siguiente: “El fabricante es BAE Systems, empresa a nuestro entender casi oligopólica, que entregó productos tan problemáticos como los submarinos HMS Astute y HMS Ambush y los destructores tipo 45, dos de los cuales ya presentaron problemas de propulsión.” BAE Systems también es parte de la Aircraft Carrier Alliance, una sociedad única entre los sistemas de BAE, Thales UK, Babcock y el Ministerio de Defensa del Reino Unido, que está construyendo los portaaviones clase Queen Elizabeth.

 

Alegando razones de seguridad nacional, la legislación británica permite que una única empresa pueda proporcionar la capacidad especializada utilizada por las Fuerzas Armadas. Para aclarar lo expresado sin caer en la descripción de las disposiciones legales que permiten que eso suceda, digamos que el 48% de los contratos del sector de defensa británico están en manos de una sola empresa. Es más, son muchos los que están en manos de la misma empresa.

 

El problema derivó en una consecuencia predecible. Al no haber competencia por ofrecer determinada capacidad, las ganancias de las empresas involucradas alcanzan cifras que no alcanzarían si tuvieran que competir con otras firmas. Ahora Philip Hammond afirma querer resolver el problema. Planea crear un cuerpo independiente para supervisar los contratos que deban ser adjudicados sin competencia. No vamos a cuestionar la determinación de un ministro que ya tomó decisiones muy difíciles y que ocupa su cargo desde hace menos de dos años. Sin embargo queremos señalar que pudo haberse ahorrado más dinero si la decisión hubiera sido tomada antes.

 

El Ministerio de Defensa británico ya otorgó centenares de millones de libras para distintas cuestiones relacionadas con los submarinos Succesor. Estas naves serían la nueva generación de submarinos armados con misiles balísticos con ojivas nucleares (SSBN) para la Royal Navy. Recordamos a nuestros lectores que la decisión final sobre el reemplazo de los submarinos clase Vanguard aún no ha sido tomada. La misma se tomará recién en el 2016. El dinero, sin embargo, ya fue destinado a tres empresas. Una de ella es BAE Systems. Es obvio que algunas cuestiones fueron manejadas con desprolijidad, pero eso viene de arrastre.