GRAN BRETAÑA UN PASO MÁS CERCA DEL F-35B

16.04.2012 20:34

El primer F-35 Joint Strike Fighter del Reino Unido completó su vuelo inaugural el viernes 13 de abril, según anunció la empresa Lockheed Martin. El reactor de despegue corto y aterrizaje vertical BK-1, salió de la línea de producción en noviembre pasado.

La semana pasada hizo el primer vuelo, el cual duró 45 minutos. Lo comandó el piloto de pruebas de la Lockheed Martin, Bill Gigliotti. Fue la primera de una serie de pruebas de vuelo antes de que el avión sea entregado al Ministerio de Defensa del Reino Unido.

 

Luego, hacia fines de año, el Ministerio de Defensa británico iniciará la formación de los primeros pilotos y pruebas más exhaustivas en la Base Aérea de Eglin, en Florida, EEUU.

 

El BK-1 es el primero de tres aviones F-35 que el Reino Unido ya se había comprometido a comprar, a saber, dos F-35B y un F-35C. Todavía se desconoce cuál será el número final de aparatos a adquirir. Tampoco se sabe con certeza cuál será la variante a elegir por parte de los británicos, aunque en ese sentido hay algunas novedades.

Hoy trascendió que los más altos funcionarios del Ministerio de Defensa británico (MoD) se están preparando para dar marcha atrás en la decisión tomada sobre el tipo de avión que operará desde los nuevos portaaviones de la Royal Navy.

 

Una reevaluación del programa ordenada por el Primer Ministro, sugiere que la variante F-35B es más económica y que probablemente sería capaz de entrar en servicio antes que la variante F-35C.

 

Un alto funcionario de defensa - que no quiso ser identificado - advirtió de los riesgos de que el presupuesto de defensa vuelva a dispararse si se opta por la variante F-35C y agregó que los Jefes de Estado Mayor de la Royal Navy y de la RAF están de acuerdo en volver a la variante STOVL (despegue corto y aterrizaje vertical).

 

En el rediseño de los portaaviones a la versión CATOBAR (Catapult Assisted Take-Off But Arrested Recovery, es decir, despegue asistido por catapulta y recuperación mediante detención por cable de frenado) ya se habrían gastado unos 250 millones de libras desde el año 2010, cuando el Primer Ministro británico, David Cameron, ridiculizó la elección por parte de los laboristas de la aeronave STOVL, calificándola de ser la "versión más cara y menos capaz de los Joint Strike Fighter".


"Este cambio de sentido sería una humillación para el Primer Ministro", advirtió el secretario de Defensa del gabinete en las sombras de Jim Murphy.

 

Realmente es difícil de entender tanto cambio de decisión por parte del MoD. Evidentemente la Revisión Estratégica de la Defensa y la Seguridad del año 2010 fue hecha de forma precipitada. Es cierto que el agujero negro del presupuesto de defensa británico era enorme, pero difícilmente justifique tanta desprolijidad e indecisión. Para el colmo los ingleses se quedarán con la versión menos capaz del programa.