LAS PUERTAS DEL INFIERNO: MARX EN EL VATICANO

11.08.2021 08:29
 
"Pues, ¿de qué le sirve al hombre haber ganado el mundo entero, si él mismo se pierde o se arruina?" - Lucas 9, 25
 
En un documento de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe sobre la "teología de la liberación" leemos: "La presente Instrucción tiene un fin más preciso y limitado: atraer la atención de los pastores, de los teólogos y de todos los fieles, sobre las desviaciones y los riesgos de desviación, ruinosos para la fe y para la vida cristiana, que implican ciertas formas de teología de la liberación que recurren, de modo insuficientemente crítico, a conceptos tomados de diversas corrientes del pensamiento marxista".
 
El Dr. Taylor Marshall afirma que los jesuitas en general se han visto profundamente influenciados por esta desviación teológica. Según él, el Santo Padre no es la excepción. "La 'teología de la liberación' proponen una interpretación innovadora del contenido de la fe y de la existencia cristiana que se aparta gravemente de la fe de la Iglesia, aún más, que constituye la negación práctica de la misma", continúa el documento arriba mencionado.
 
La negación práctica de la fe, esa es la clave del tema. "El verdadero milagro, dice Jesús, no es la multiplicación que produce orgullo y poder, sino la división, el compartir, que aumenta el amor y permite que Dios haga prodigios", son palabras del Papa Francisco pronunciadas durante el Angelus del domingo 25 de julio de 2021. Jesús sí multiplicó los panes y los peces y no para sentir orgullo y poder. 
 
Como vimos, una de las consecuencias de la "teología de la liberación" es la negación práctica de la fe. Entonces, según los que adhieren a la misma, Jesús no realizó milagros, su presencia eucarística no es real. Entonces que el Presidente estadounidense Joe Biden comulgue, aunque propicie activamente el aborto, no es problema. Para muchos de los que adhieren a la teología de la liberación, la presencia de Cristo en la Eucaristía no es real, es simbólica. Según muchos, no resucitó de entre los muertos, sólo vive en los corazones de los que "creen" en Él. Si no hay fe, no hay pecado, por ende cualquier opción sexual o "de género" es válida, tal como lo sostiene el sacerdote jesuita James Martin, cuyo trabajo fue "reconocido" por el mismísimo Papa Francisco. ¿Quo vadis, Francisco? ¿A dónde va, Su Santidad? Es más, ¿a dónde pretende llevarnos? 
 
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Fuentes: infovaticana.com; vatican.va; es.catholic.net; taylormarshall.com; bibliacatolica.com.br
 
Primera parte aquí:
 
Continúa aquí:
 
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