UCRANIA: 72 HORAS (actualizado)

27.01.2022 06:41
 
El Embajador de los EEUU en Moscú presentó ayer la respuesta escrita a las demandas rusas. Si bien el contenido completo no trascendió se sabe que la exigencia de Putin de que Ucrania nunca se transformaría en un miembro de la OTAN, no fue atendida. Aunque es imposible saber qué pasa por la cabeza de Putin, hay que prepararse para lo peor. Algunos especulan que de atacar, los rusos lo harían una vez finalizados los Juegos Olímpicos de Invierno 2022, que comenzarán en China el próximo viernes 4 de febrero y terminarán el domingo 20 de febrero. Quienes presumen que será así, afirman que Putin no querrá quedar mal con su socio Xi Jinping. Es posible que sea así, también es posible que Putin ataque justo entonces, en el momento menos esperado. El suelo ucraniano ya se congeló y esas condiciones durarían hasta algún momento de marzo. Después las operaciones de las fuerzas blindadas se volverían más difíciles. Además los EEUU y el Reino Unido están armando a los ucranianos y tal vez el Kremlin prefiera no esperar. De todos modos las armas enviadas no satisface plenamente las necesidades de Kiev. Los cargamentos no incluyen misiles antiaéreos, al menos no los de mediano y largo alcance. Sin esas armas, la otra ayuda es relativa. De atacar, Putin podría no optar por una acción frontal.
 
Los rusos tienen una artillería poderosa que incluye todo tipo de misiles. Sus buques de superficie y sus submarinos cuentan con muchas armas de ataque a tierra, algunas de ellas hipersónicas, hoy por hoy no pueden ser interceptadas antes de llegar a sus objetivos. El domingo 23, el destructor antisubmarino ruso "Vice-admiral Kulakov", la fragata  "Admiral Kastanov" y el crucero "Marshal Ustinov" fueron avistados por un buque de la Guardia Costera de Noruega en aguas próximas a la costa de Finnmark, Noruega. La flotilla rusa, que navega hacia a Irlanda para efectuar ejercicios, está compuesta por cinco naves, dos de ellas auxiliares. Se considera muy probable que un submarino de propulsión nuclear también sea parte de la misma. Gran Bretaña envió armas a Kiev, ahora los rusos harán ejercicios con munición real frente a Irlanda. También habría submarinos nucleares de misiles balísticos frente a los EEUU. El que cuenta el número de soldados rusos en la frontera con Ucrania (número que los medios redujeron de 175.000 a 100.000 efectivos sin mucha explicación), no entiende que la flota y la aviación rusas podrían ser, junto a los misiles Iskander, las principales armas de Putin. La aviación ni siquiera necesita entrar en espacio aéreo ucraniano; puede disparar sus misiles de crucero desde espacio aéreo ruso y/o bielorruso. La invasión, después de todo, no es una necesidad primordial de los rusos. Pueden destruir lo más posible desde el mar y desde su territorio y exigir nuevas negociaciones.
 
Edificio de Administración Presidencial, Kiev - Foto: Håkan Henriksson creativecommons.org/licenses/by/3.0/deed.en (la imagen original ha sido redimensionada)
 
En principio, Putin no arriesga mucho. La OTAN y la Unión Europea tratan de dar una muestra de cohesión ante la amenaza pero en la práctica no es así. Alemania depende demasiado del gas ruso; Francia no soporta a los EEUU; en el Reino Unido, Boris Johnson está siendo investigado por la policía por haber transgredido reiteradamente sus propias normas anti-covid. Los Estados Unidos son ese país que abandonó Afganistán dejando atrás a sus propios ciudadanos y trece soldados muertos porque Joe Biden decidió dejar la Base de Bagram sin siquiera avisar a sus socios. Lamentablemente Putin no tiene por qué temblar ante las amenazas de un presidente tan senil que estos días calificó a un periodista de "estúpido hijo de p***" ante un micrófono encendido. Como si eso fuera poco, el Ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, acaba de expresar que  "las razonables preocupaciones de seguridad de Rusia deben ser tomadas con seriedad y resueltas". El panorama no es alentador para Ucrania, no lo es para Occidente. Kiev podría estar firmando la rendición tres o cuatro días después de iniciado el ataque. El Presidente Zelenski no amasó una fortuna para ahora dar la vida por Ucrania. 
 
Actualización: 27/1 15:00 hora argentinaEl canal de YouTube "Military Insider" (generalmente asume posturas prorrusas) informa que Rusia envió a la frontera con Ucrania, más especificamente a la zona de Belgorod, próxima al Donbás, un batallón de guerra electrónica dotado con el sistema Leer-3. El sistema se basa en vehículos aéreos no tripulados equipados con un sistema de guerra electrónica. Las aeronaves no tripuladas están diseñada para localizar fuentes de emisión electromagnética y suprimir las comunicaciones inalámbricas. Eso incluye los teléfonos móviles. Lo hace en un radio de más de 6 kilómetros. El sistema Leer-3 consta de tres drones Orlan-10 y un centro de comando. Fue usado recientemente, aparentemente con éxito, durante la revuelta kazaja. Algunos fuentes también dan cuenta de su uso en Siria. El canal no da más detalles de la composición del mencionado batallón. De a poco los rusos van completando el equipamiento y la logística necesarias para una eventual escalada del conflicto. 
 
Artículos relacionados: