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EL SEGUNDO PORTAVIONES DE LA CLASE QUEEN ELIZABETH INICIA SUS PRUEBAS DE MAR

23.09.2019 09:18
 
Hace algo más de dos años, el día 26 de junio del 2017, el portaaviones HMS Queen Elizabeth zarpaba para iniciar sus pruebas de mar. Apenas algo más de dos años después lo hace el segundo portaaviones de la clase, el HMS Prince o Wales. En estas primeras pruebas el buque de 70.000 toneladas pondrá a prueba su estabilidad y maniobrabilidad. Mediante una impresionante inyección de dinero en las arcas de la Defensa británica se consiguió lo que parecía imposible: el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte está en camino a tener dos portaaviones operativos.
 
Ciertamente habrá dificultades. Por ahora los británicos tienen apenas un puñado de aviones F-35B operativos, una severa escasez de marineros y de buques de escolta y un tremendo rojo en las finanzas de la Defensa. El HMS Queen Elizabeth tiene una serie de inconvenientes técnicos pero los mismos no le impidieron iniciar su segundo despliegue hacia los Estados Unidos de Norteamérica.
 
Cabe preguntarse si la decisión de los británicos de construir portaaviones tan grandes fue acertada. La clase que precedió a la Queen Elizabeth - la Invincible - tenía un desplazamiento de unas 22.000 toneladas. Era un tamaño más razonable y el riesgo se repartía entre un mayor número de unidades. La Royal Navy tiene compromisos desde el Ártico hasta Malvinas y la Antártida y desde el Caribe y el Mediterráneo hasta el Mar del Sur de China. ¿No hubiera sido más sensato construir buques de menor tamaño dejando abierta la posibilidad de acrecentar su número?
 
Sea como fuere los planes siguen adelante a pesar de - o precisamente por - el brexit y otras cuestiones políticas. El actual Primer Ministro británico es un acérrimo promotor de la idea de la Gran Bretaña Global y quiere dotarla de un brazo armado fuerte. Las pruebas están a la vista. 
 

BREXIT: BRUSELAS CON EL AGUA AL CUELLO (O LA BAYONETA EN LA YUGULAR)

20.09.2019 09:34
 
En el vértigo y cierto caos creados por la proximidad de la fecha de salida del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte de la UE no es fácil separar la paja del trigo. En nuestro artículo del pasado martes afirmábamos: "[Boris] Johnson quiere salirse de la Unión Europea; si le dan la posibilidad de una salida no traumática, tanto mejor. Pero como tiene en mente la idea de la restauración del poder global británico la actitud de los federalistas europeos tiene para él un valor relativo". Eso es lo que parece estar sucediendo en el tablero de ajedrez europeo. El Primer Ministro británico está jugando una excelente partida, está obligando a los europeos a intensificar las negociaciones, a mostrar flexibilidad donde antes había intransigencia, a hacer propuestas y declaraciones coherentes y otras que no lo son tanto. El premier parece estar decidido: o gana la partida o patea el tablero haciendo volar las piezas de la arrogancia del federalismo europeo por los aires.
 
Claro, no todo sería color de rosa para los británicos si se llega a un brexit sin acuerdo pero no olvidemos que estamos hablando de un pueblo que soportó estoicamente los bombardeos de Londres durante la Segunda Guerra Mundial. Algún historiador podría argumentar que ellos mismos provocaron esos bombardeos pero eso no viene al caso. Seguir siendo miembros de la Unión Europea tiene un precio demasiado elevado para los británicos. La extremadamente laxa política europea respecto a la inmigración, su incipiente ruptura con la OTAN (recordemos que algunos lideres federalistas hablan de los Estados Unidos de Norteamérica como de un potencial enemigo o al menos adversario); la creación de un Ejército Europeo por parte de países que ni siquiera cumplen con la cuota de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y su creciente alineamiento con un globalismo aún más siniestro que el de los británicos, hace que los éstos quieran romper parte de sus lazos con la UE. Es entendible.
 
Mientras Bruselas busca (tardíamente) una salida, Johnson se reúne con los jefes de sus fuerzas armadas y les aumenta el presupuesto y les habla de su rol en la Gran Bretaña Global. Será impuesta por las buenas o por las malas y eso a la mayoría de los ingleses no le disgusta. Recuerdan y/o conocen la extensión que alguna vez tuvo el Imperio británico, recuerdan su esplendor y opulencia y antes que ser súbditos de un Nuevo Orden Mundial prefieren restaurar su supremacía de antaño. Si Europa les ofrece una salida fácil, tanto mejor. Caso contrario sufrirá tanto o más que los habitantes del reino. Los federalistas europeos de pronto parecen haber descubierto que Londres siempre habló en serio cuando se trataba de irse. Quisieron correr a los británicos con la vaina y ahora la bayoneta se les está clavando en el cuello. Ya lo dijimos, de aquí en más puede pasar cualquier cosa.
 
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CARACTERÍSTICAS QUE SE BUSCAN PARA LOS CAZAS DE SEXTA GENERACIÓN (SEGUNDA Y ÚLTIMA PARTE)

18.09.2019 15:14
 
Algunas de las características de la que se pretende dotar a los cazas de sexta generación no serán fáciles de lograr. Al menos la marina estadounidense quiere que estos aparatos operen desde portaaviones ubicados bien fuera del alcance de los misiles enemigos. A eso hay que agregar que se pretende una gran capacidad de carga de armas. Reabastecer a estas naves en el aire implicaría correr el riesgo de delatar su posición y por ende perder la ventaja de la furtividad. Tal vez las pretensiones sean demasiadas.
 
Por otra parte la interconectividad con otros sistemas de armas implicará una gran cantidad de datos que deberán ser procesados, muchos de ellos por un piloto a bordo de una aeronave. Para ello se deberá desarrollar nuevos sistemas de entrenamiento donde los simuladores tendrán mayor peso que las prácticas reales ya que sería imposible o muy difícil reproducir determinadas condiciones de la realidad, al menos con la frecuencia que requiere un entrenamiento intensivo de un piloto de élite.
 
Otra del las formas de procesar la gran cantidad de datos que provendrán de diferentes sistemas será mediante la inteligencia artificial. Podríamos decir que la inteligencia artificial es la capacidad de un sistema para interpretar correctamente datos externos (en este caso proveniente de diferentes sensores de cada aeronave y de otros sistemas de armas), para aprender (si vale el término) de dicha información y para emplear esos "conocimientos" para lograr tareas y/o metas concretas. El problema principal pasa por la toma de "decisiones". Si se permite que la inteligencia artificial tome acciones de forma autónoma se corren muchos riesgos. Los expertos no se cansan de llamar la atención sobre la imprevisibilidad de las "conclusiones" al las que podría arribar un sistema en determinadas condiciones. No queremos explayarnos sobre el tema, lo hemos estudiado bastante y damos fe de esa imprevisibilidad. Es por eso que muchos pretenden que haya un piloto a bordo de la aeronave en cuestión, aún cuando la misma podría ser operada de otra forma.
 
Hay otras cuestiones asociadas al avance de estos programas. Los costos serán sin dudas siderales. Muchos aseguran que será muy difícil que el Tempest y el caza de sexta generación que desarrollan Alemania, Francia y España lleguen a ser sostenibles si ambos proyectos no confluyen. Las perspectivas políticas en ese sentido son inciertas, recordemos que queda sin resolver el tema del brexit. Si finalmente prosperan la brecha tecnológica militar entre determinados bloques de países y/o regiones se acrecentará enormemente. Pensemos sólo en la posibilidad de que en dos décadas los ingleses pudieran estacionar algunos aparatos Tempest en Malvinas. Vemos poco probable que el Tempest pueda ser desarrollado y construido en los plazos previstos pero de todos modos la sola idea nos hace sentirnos en la edad de piedra. Si los cazas de sexta generación son un desarrollo siniestro, nuestra inoperancia no lo es mucho menos. No lo decimos por nadie en particular, nos incluimos. No lo decimos con ánimo de desanimar sino de generar conciencia respecto al tema.
 
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CARACTERÍSTICAS QUE SE BUSCAN PARA LOS CAZAS DE SEXTA GENERACIÓN

18.09.2019 10:46
 
Mientras los aviones de combate de quinta generación todavía están bien lejos de alcanzar su madurez, los Estados Unidos de Norteamérica, dos grupos de naciones europeas y hasta países asiáticos tienen proyectos de desarrollo de cazas de sexta generación. Seguramente cada uno tendrá características propias pero describiremos las expectativas generales para que el lector pueda hacerse una idea más clara de lo que se pretende lograr con el avance de estos programas. Furtividad superior a la del F-35; eficiencia en vuelos subsónicos, supersónicos e incluso hipersónicos; interconectividad con otros sistemas de armas incluida aquella que pueda darse con diferentes vehículos aéreos no tripulados; armas de última generación; muchas mejoras en las tecnologías ya existentes (por ejemplo en los sistemas de detección); inteligencia artificial y capacidad de operar con o sin tripulantes y de hacerlo en la profundidad del territorio enemigo en condiciones altamente adversas son algunas de las características que se mencionan.
 
En la actualidad los aviones furtivos lo son para radares que operan en determinada banda. Se pretende que en los cazas de 6ta generación el sigilo sea mucho mayor, en mayor o menor medida en todo el espectro radar. No sólo eso, se espera que sean furtivos en el espectro infrarrojo y en el electromagnético, en otras palabras, que sean casi indetectable para todo tipo de sensores. Suena utópico y ciertamente lo es. La prueba está en que entre las armas que portarían estos aparatos habría misiles antimisiles. En otras palabras se busca furtividad total pero se espera que tarde o temprano estas aeronaves sean detectadas y atacadas. Claro que ahí empieza el desarrollo enemigo de misiles antiaéreos extremadamente difíciles de detectar o al menos de destruir, como podrían ser los misiles hipersónicos. De hecho estos últimos ya existen y alcanzan velocidades cada vez mayores que dejan poco o ningún margen para la reacción. Además como estas aeronaves deberán ser más veloces que sus predecesoras necesariamente tenderán a generar una mayor firma infrarroja, con lo que habrá que mejorar la tecnología de enfriamiento o la detección se verá facilitada.
 
Una de las propuestas válidas sería complementar la furtividad con la construcción de grandes drones que puedan volar en enjambres de diferentes densidades con el propósito de confundir o saturar a los sistemas de detección enemigos. El ex Ministro de Defensa británico Gavin Williamson quería contar con ellos para fines de este año pero ese plazo demostró ser imposible de lograr.
 
Entre las armas más novedosas de los cazas se encontrarían rayos laser (todavía hay muchas dificultades técnicas por resolver antes de incorporarlos); microondas de alta potencia y hasta alguna capacidad del tipo de las armas de pulso electromagnético. También está en desarrollo una nueva generación de todo tipo de bombas y especialmente misiles y micromisiles que puedan ser usados por estos aparatos. Estas armas no son totalmente novedosas sino que se basan en la experiencia que se va ganado con las ya existentes cuya evolución, si bien se aceleró de un tiempo a esta parte, fue bastante lenta. No olvidemos que algún muy usado misil aire-aire se desarrolló en base a tecnología alemana de la Segunda guerra Mundial y ya lleva casi 70 años en servicio si se toman en cuenta sus diferentes variantes. (Continuará)
 
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BORIS JOHNSON Y LAS VENTAJAS DE SER NACIONALISTA

17.09.2019 08:29
 
Boris Johnson es uno de los principales exponentes del globalismo británico, un hombre mucho más convencido acerca de la idea de la Gran Bretaña Global que su predecesora Theresa May que por tibia e indecisa debió dejar el puesto sin lograr el principal objetivo de su gobierno: llevar a cabo una salida ordenada de Europa. No tuvo grandes enemigos y por ende tampoco amigos y terminó siendo el hazmereír de todos. Lloró ante las cámaras y por los rincones. Johnson quiere salirse de la Unión Europea; si le dan la posibilidad de una salida no traumática, tanto mejor. Pero como tiene en mente la idea de la restauración del poder global británico la actitud de los federalistas europeos tiene para él un valor relativo. Si tiene que salirse por las malas, peor para los demás países de Europa. Tiene confianza en sí mismo y en la idea por la que lucha y eso le juega a favor. El Reino Unido es una potencia militar y sobre todo económica y no quiere cargar con el lastre de la tibieza de Europa que con el perverso juego de Merkel de permitir la inmigración indiscriminada está perdiendo su identidad, sus puestos de trabajo, su seguridad interior y su tranquilidad. La idiosincrasia de la mayoría de los británicos sigue siendo la de un pueblo que confía en sus habilidades. Lo demostraron durante los días más oscuros de la Segunda Guerra Mundial y lo siguen haciendo ahora.
 
Los europeos dicen que son los británicos los que deben proponer una salida al punto muerto del brexit. Johnson lo intenta y tiene algo a su favor: no le teme al fracaso. El Reino Unido ya se preparó para el brexit: firmó acuerdos comerciales con cuanto país estuvo dispuesto a hacerlo, se ganó la simpatía del poderoso Donald Trump y no por último, se está armando hasta los dientes. Johnson cuenta con la simpatía de los nacionalistas y de los euroescépticos británicos que empiezan a verlo como un paladín del orgullo británico, un héroe que no se fija en sus heridas sino en los avances hacia la meta. Los europeos afirman que no darán el brazo a torcer, que la solución es responsabilidad de los británicos pero por las noches tiemblan y transpiran. Probablemente Gran Bretaña sobreviviría los efectos de una crisis, el resto de Europa, quién sabe. 
 
Oculta tras su arrogancia, Boris Johnson tiene una gran autoestima y una decisión férrea. Eso le granjea muchos enemigos y aún más amigos y aliados. Las críticas de la izquierda no le molestan, le hacen ver que va por el camino correcto. La deserción de algunos conservadores se ve compensada por el apoyo de aquellos que votaron por la salida en el referéndum del 2016. La bravatas de transformarse en el gigante musculoso verde si lo hace enojar tiene un doble propósito: mostrar su decisión a los propios y su flema inglesa a los ajenos. Con todos sus defectos Johnson tiene una gran virtud: no cuenta heridas ni bajas mientras camina decididamente hacia los que cree correcto. Deshacerse del lastre de algunos arrogantes federalistas europeos lo es.
 

EXCELENTE JUGADA BRITÁNICA: ITALIA YA ES PARTE DEL PROYECTO DEL TEMPEST

13.09.2019 08:41
 
El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte acaba de cosechar un gran logro para la Real Fuerza Aérea. Italia ya es formalmente parte del proyecto Tempest. Los británicos planean invertir en las primeras fases del desarrollo del programa y en cuestiones asociadas al mismo la suma de 2.000 millones de libras, es decir unos 2.500 millones de dólares. Suena a mucho dinero pero para semejante proyecto no lo es, por eso Londres necesita socios. En julio de este año Suecia decidió ser de la partida. Ahora se sumaron los italianos, socios aún más interesantes que los suecos. Con Francia, Alemania y España unidos en su propio desarrollo de un caza de sexta generación y con un panorama político europeo complejo que no augura una pronta fusión de ambos proyectos (si es que ésta llega a concretarse), la participación de Italia se vuelve crucial.
 
Gran Bretaña e Italia tienen algunos puntos importantes en común en materia de aviación militar. Ambos países europeos son usuarios del Eurofighter Typhoon y del F-35. Los italianos declararon que alcanzaron la capacidad operativa inicial del avión F-35A Lightning II en febrero de este año. De hecho ambos países también son socios del programa del F-35, fabricando algunos de los sistema más importantes de los mismos. Ambos desarrollaron y operaron el Panavia Tornado, de hecho Italia aún lo opera. La experiencia de fabricación del F-35 seguramente será aprovechada para el diseño y desarrollo del Tempest.
 
Con la firma de la carta de intención se sumarán al proyecto - además de la filial británica de Leonardo, que ya es parte del mismo - otras empresas italianas. El Tempest, tal como lo habíamos anunciado oportunamente, está decididamente en marcha. Los partidarios de la Gran Bretaña Global no están bromeando y están preparando su brazo armado. En tanto en Argentina, con diferencia de apenas semanas, dos sistemas de armas más  de la Fuerza Aérea Argentina se están yendo de baja sin reemplazo. No es culpa sólo del actual gobierno cuyas relativamente buenas intenciones en la materia fueron golpeadas por la realidad. La dirigencia política argentina en su conjunto está fallando en darle a la nación un instrumento militar creíble. Quienes ya ocupan nuestro territorio y nuestros vecinos se están armando. En las actuales circunstancias el futuro de nuestra soberanía es bastante sombrío.
 
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¿SE REPETIRÁ LA AMENAZA DE AMOTINAMIENTO CONTRA JEREMMY CORBYN?

11.09.2019 10:06
 
Ayer martes, la oposición británica anunció que está negociando el borrador de un acuerdo por el brexit con la intención de votarlo ni bien el Parlamento vuelva a sesionar después de la suspensión de las sesiones dispuesta por el Primer Ministro Boris Johnon y aprobada por la reina Isabel II. El ridículo parlamentario británico ahora es completo. Después de rechazar sistemáticamente todas las propuestas de una salida negociada de la Unión Europea, ahora los legisladores de la oposición y hasta los conservadores rebeldes del Reino Unido quieren resolver en un par de semanas lo que vienen impidiendo sistemáticamente hace demasiado tiempo. El referéndum en el que los habitantes del reino se pronunciaron a favor de una salida de la federación europea fue celebrado el 23 de junio del 2016, es decir hace más de tres años.
 
Obviamente uno de los principales promotores de la acometida opositora es el partido laborista de Jeremmy Corbyn. Recordemos que cuando este político fue electo como líder de su partido y comenzó a expresar algunas ideas como la de retirarse de la OTAN, un general de alto rango del Ejército Británico advirtió que un gobierno de Corbyn podría enfrentar un motín si - ante la eventualidad de que llegara a ser Primer Ministro - anunciaba "cualquier plan para castrar y reducir el tamaño de las fuerzas armadas" británicas. Estos días el mandamás de la Royal Navy catalogó al brexit como una oportunidad y dijo que la Marina Real está al servicio de la Gran Bretaña Global. Es claro de qué lado están los altos mandos de la RN.
 
El Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte pasa por un proceso tenso. Los británicos euroescépticos - aquellos que en el 2016 decidieron por mayoría la finalización de la pertenencia a la UE - empiezan a ver el parlamento como un ente obstruccionista. Boris Johnson empieza a ser visto como un héroe nacional. El premier suspendió las sesiones parlamentarias y la oposición está reaccionando. No por el punto muerto del brexit que Johnson quiere romper, reacciona porque se ve privada de un poder que no supo aprovechar adecuadamente. El clima político londinense está caldeado. Las posibilidades que quedan abiertas son muchas. 
 
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ITALIA SE SUMARÍA AL PROYECTO DE CAZA DE SEXTA GENERACIÓN TEMPEST

10.09.2019 12:02
 
Italia estaría a punto de anunciar que se sumaría al proyecto de caza de sexta generación Tempest. Lo haría hoy en el DSEI 2019, un evento que "conecta a gobiernos, fuerzas armadas nacionales, líderes de pensamiento de la industria y la cadena de suministro de defensa y seguridad global en una escala inigualable", según lo afirma bastante pretenciosamente su página web oficial. El anuncio lo harían los ministerios de defensa del Reino Unido e Italia. De ese modo los italianos se unirían formalmente a los británicos y a los suecos en este ambicioso programa. Todavía no se conoce a qué nivel se involucraría Roma. Recordemos que la filial británica de Leonardo ya es parte del proyecto. Por su parte franceses, alemanes y españoles desarrollan su propio caza de última generación. Si ambos proyectos no se fusionan no será fácil lograr que sean viables y en ese sentido las circunstancias políticas son bastante desfavorables por el momento.
 
Según pretenden los británicos el Tempest deberá ser furtivo (¿la furtividad es realmente posible hoy en día?), deberá poder ser operado con o sin piloto, controlar enjambres de drones, tener capacidad de conectarse con otros aviones y operar en colaboración con los mismos (¿no era ese uno de los "adelantos" del F-35?). En teoría estas aeronaves poseerán un armamento que hoy por hoy aún suena a ciencia ficción, al menos para los términos británicos: misiles hipersónicos, armas de energía dirigida y hasta inteligencia artificial.
 

EL PARLAMENTO BRITÁNICO HACE SURGIR A UN CAUDILLO FUERTE: BORIS JOHNSON

09.09.2019 09:33
 
La Cámara de los Lores del Parlamento británico aprobó la ley que busca impedir una salida brusca de la Unión Europea aunque el propio Parlamento se reservó el derecho de decidir sobre la misma; en última instancia podría aprobarla aunque eso parece poco probable. Los Comunes en su momento rechazaron tres veces el acuerdo al que había arribado la ex Premier Theresa May con Bruselas. Tampoco fueron capaces de proponer otra solución viable. Ahora están pagando el precio: muchos británicos partidarios del brexit empiezan a ver a su poder legislativo como un ente obstruccionista; tienen razón. Los diputados británicos no aprueban nada, no proponen nada y tienen bien merecida la suspensión de las sesiones aprobada por la propia reina Isabel II en una medida totalmente legítima. Los parlamentario también parecen ignorar que un pedido de extensión debería ser aprobado por la federación europea y que Francia ya se pronunció en contra.
 
Boris Johnson sigue dando pelea, al parecer estaría dispuesto a desacatar la ley e ir a la cárcel con tal de salir de Europa antes del 31 de octubre. Insiste en las elecciones anticipadas y hasta está dispuesto a renunciar para lograrlas. Su decisión le va ganando adeptos entre los nacionalistas ingleses. Entre tanto los ánimos de uno y otro lado se caldean y vuelve a surgir la tensión en las calles. La firmeza de Boris Johnson podría costarle caro pero también podría elevarlo a una condición de líder, de caudillo nacionalista. En una democracia desgastada por la indecisión y la inacción parlamentaria eso siempre es una posibilidad. Un líder fuerte y globalista puede ser un peligro para otras naciones. Los argentinos no debemos olvidar que tenemos una poderosa base militar británica en nuestro propio territorio. Ni los políticos de derecha ni los de izquierda se preocuparon de dotarnos de Fuerzas Armadas capaces de defendernos. Dos países diferentes con la misma desidia, la misma indecisión, la misma histeria, perdón, historia.
 
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DESTINAN 2.700 MILLONES DE DÓLARES ADICIONALES AL BRAZO ARMADO DE LA GRAN BRETAÑA GLOBAL

06.09.2019 09:29
 
El 22 de agosto de este año informábamos que el gobierno de Boris Johnson había confirmado que el segundo portaaviones de la Clase Queen Elizabeth entraría en servicio con la Royal Navy. También comunicábamos que el buque en cuestión, el HMS Prince of Wales, había alcanzado esa semana un hito importante: había realizado la primera serie de pruebas de radares y equipos de control de tráfico aéreo desde su sala de operaciones. La Base Naval de Portsmouth está preparando su infraestructura para la llegada de la nave, la cual estaría arribando a la misma a fines de este año.
 
No es todo ni mucho menos. El gobierno británico acaba de anunciar que en los próximos dos años las fuerzas armadas del Reino Unido recibirán una partida adicional de 2.200 millones de libras (unos 2.706 millones de dólares), lo que representa un incremento real del 2.6 % en el presupuesto de Defensa de Gran Bretaña.
 
Por otra parte la Royal Air Force acaba de presentar en sociedad, a través de su página web oficial, al equipo TEAM TEMPEST, formado por la propia RAF, el Ministerio de Defensa británico y algunas empresas privadas. El equipo está desarrollando el caza de sexta generación Tempest, proyecto faraónico que también sigue adelante.
 
No todo es perfecto, claro, la crónica falta de personal, el retraso y el costo descontrolado en algunos programas de defensa y los serios problemas en otros son reales. Nada de eso parece quitarle el sueño a los promotores de una Gran Bretaña Global militarmente fuerte. Boris Johnson logró que se suspendieran las sesiones del Parlamento a partir del lunes próximo, la reina lo aprobó. Revés más o revés menos los globalistas británicos ya mostraron que no se dejarán amedrentar por la oposición interna. El intento de restaurar el Imperio Británico, delirante o no, está en marcha. 
 
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