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DUDOSA DEMOSTRACIÓN DE FUERZA BRITÁNICA

08.04.2021 09:37
 
Mientras el Grupo de Ataque del portaaviones USS Theodore Roosevelt ingresa al Mar del Sur de China por segunda vez en lo que va del año y los rusos hacen una acumulación masiva de tropas y material militar en la frontera de Ucrania, los británicos preparan su propio Grupo de Batalla de portaaviones para un despliegue a la región de Asia-Pacífico en algún momento del corriente año. Si bien el grupo contará con la presencia de un destructor de misiles guiados Aegis clase Arleigh Burke, de los Estados Unidos y de la fragata holandesa HNLMS Evertsen, la travesía no estará exenta de fuertes riesgos.
 
Incluyendo las dos naves extranjeras el grupo estará conformado por nueve unidades de superficie y probablemente por un submarino de ataque británico. No es descabellado pensar que los estadounidenses aportarán otro SSN, máxime cuando parte de los aviones embarcados en el QE serán norteamericanos. Aquí comienzan los problemas. El HMS Queen Elizabeth, que será el núcleo del grupo, es una nave nueva, que ya tuvo algunos inconvenientes serios. En julio del 2019, por ejemplo, debió abandonar las pruebas de mar que estaba llevando a cabo, debido a una filtración de agua que dejó algunos sectores del buque "con el agua hasta el cuello" de los marineros que los ocupaban. La otra nave de la clase está fuera de servicio desde hace unos seis meses y su reparación se estaría demorando más de lo previsto. Para quienes vimos las fotos y videos del incidente es claro que los ingleses minimizaron el problema. Los escoltas antiaéreos británicos serán tres destructores Type 45. Tremendamente ruidosos y con dificultades no completamente resueltas en su planta de poder, también deberían ser motivo de preocupación. Las dos fragatas Type 23 que navegarán con los mismos estarían armadas con misiles antibuque Harpoon, los que se encuentran al final de su vida útil (si es que todavía funcionan).
 
Misil balísitico chino DF-21. En su versión más moderna es considerado el primer misil balísitico antibuque, es capaz de destruir un portaaviones. La foto es de dominio público por decisión de su autor, Max Smith.
 
 
De todos modos no son los aspectos técnicos, si bien de peso, los más preocupantes. China tiene una fuerte presencia en el Mar del Sur de China, incluso en las zonas justamente reclamadas por otros países. Consciente de su fuerte y creciente poderío militar, ejerce su dominio con indisimulado rigor. Por otra parte existe la posibilidad real de un ataque a Taiwán, los taiwaneses ya manifestaron que están preparados para combatir.
 
Con el Ártico atestado de submarinos rusos, con los rusos golpeando a las puertas de Ucrania, con los chinos amenazando con tomar Taiwán, el despliegue británico parece osado. Seguramente sería razonable redoblar los esfuerzos diplomáticos antes de llevar a cabo una demostración de (dudosa) fuerza. 
 

BORIS JOHNSON Y EL MIEDO A UNA NUEVA RECUPERACIÓN MILITAR DE MALVINAS

06.04.2021 07:12
 
Actualizado por última vez a las 15:30 hora argentina
 
La situación internacional es extremadamente compleja. Los informes de inteligencia que llegan al ámbito público son claros: Rusia acumula fuerzas en Crimea y en su frontera con Ucrania y la posibilidad de una invasión china a Taiwán es cada vez más concreta. La democracia casi ya no existe en Hong Kong. Los estadounidenses enviaron un submarino nuclear al Atlántico Sur y éste operó con al menos una aeronave británica con base en Malvinas. En ese se contexto el Presidente Biden llamó a Putin "asesino" y los británicos preparan el despliegue de un grupo de ataque de portaaviones a la región de Asia Pacífico mientras su Primer Ministro amenaza a Argentina con defender Malvinas con la fuerza. ¿Cómo se relacionan entre sí estos hechos?
 
El extremo septentrional del Atlántico Norte es un hervidero de submarinos rusos, eso incluye al Ártico y muy probablemente al Mar del Norte. Por fuerza de su obsolescencia los británicos están dando de baja los submarinos de ataque Clase Trafalgar y sólo tienen un puñado de submarinos de la problemática clase Astute. La RAF aún no completó el número previsto de aeronaves de patrullado marítimo P-8 Poseidon, que de todos modos (así lo admiten sus propios analistas), serán insuficientes. El problema llega a tal punto que los ingleses están desarrollando su propio sistema SOKS, en inglés Wake Object Detection System (Sistema de detección de estelas). Los sistemas de detección de estelas no consisten de un solo sensor sino que son un conjunto de sensores capaces de detectar diferentes rastros que otro submarino va dejando detrás de sí. El SOKS es un sistema que los rusos utilizaron cuando todavía no tenían sonares eficaces...
 
El próximo y largamente anunciado despliegue británico al Pacífico demandará el uso de una gran cantidad de buques, entre ellos dos destructores Type 45, dos fragatas Type 23 y muy probablemente un submarino de ataque, además del propio portaaviones HMS Queen Elizabeth. Recordemos que la otra nave de la clase está fuera de servicio por un grave problema técnico que tuvo a principios de diciembre del año pasado. Lo que queda para defender a las islas británicas es poco y los submarinos rusos son muchos. El total de los buques de escolta británicos es de 19 sólo en los papeles, en la práctica la disponibilidad total y la disponibilidad inmediata son mucho menores.
 
Lo que separa a Argentina continental de Malvinas son cuatro aeronaves Eurofighter Typhoon y un buque patrullero. El último ejercicio británico realizado en Malvinas tomaba como escenario hipotético una incursión de las Fuerzas Especiales argentinas a las Islas. ¿En qué podrían llegar hasta allá? Según los ingleses las posibilidades son varias. Las más creíbles son: en uno o más buques pesqueros o en uno o más submarinos. Claro, Argentina no tiene submarinos operativos pero... si los Estado Unidos enviaron un submarino propio a la zona para ayudar a los británicos, ¿por qué no enviaría alguno Rusia cuyo primer mandatario, el ex agente de la KGB Vladimir Putin, fue llamado "asesino" por Biden? Es más, los propios chinos tienen sobrados intereses en el Atlántico Sur y por otra parte una maniobra de distracción podría ser muy conveniente.
 
No alentamos ninguna aventura militar en Malvinas (aunque una incursión podría significar sólo enarbolar la bandera argentina, fotografiarla y desparecer). Argentina ya tiene suficientes problemas y por ahora la causa Malvinas debe seguir por la vía diplomática, cualquier otra vía sería un suicidio como nación. Nuestra patria y sus héroes, que ya sufrieron muchísimo, merecen un tratamiento muy serio del tema. El problema es que Argentina es un país políticamente inestable que está atravesando un momento muy delicado. Londres se prepara para cualquier posibilidad, por mucho que nosotros desalentemos una incursión con el máximo énfasis y realmente la consideremos altamente improbable. 
 
Actualización: a pocas horas de publicado este artículo leemos en el sitio www.zona-militar.com que "hoy comienza el Ejercicio del Comando Conjunto de Fuerzas de Operaciones Especiales (CCFOE) que cuenta con la participación de los distintos grupos de las Fuerzas Especiales de las tres Armas" (de las FFAA argentinas). El mismo sitio se hace eco de la noticia - publicada por los más diversos medios - de que el pasado sábado un portaaviones y cinco buques de escolta chinos pasaron por una vía estratégica clave frente a Japón - cerca de Okinawa - en su ruta hacia el Océano Pacífico, lo cual en la actuales circunstancias, causa no poco nerviosismo.
 
 
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LA DEFENSA BRITÁNICA: MÁS DINERO, MENOS PERSONAL Y MENOS EQUIPAMIENTO EN EL CORTO PLAZO

05.04.2021 12:41
 
Los británicos están reestructurando todo lo concerniente a su Defensa y a su Seguridad. Teóricamente inyectarán en ello una gran suma de dinero: unos 15.500 millones de libras esterlinas (unos 21.267 millones de dolares) en 4 años. En la práctica cabe preguntarse de dónde saldrá tanto dinero en una Gran Bretaña post brexit y golpeada por el covid-19. Aun cuando Londres lograra reunir esa suma, buena parte de la misma debería ser destinada a cubrir el déficit ya existente en la arcas de la Defensa. Ya a fines del 2018 escribíamos: "Según la National Audit Office (NAO - Oficina Nacional de Auditoría) británica, el déficit del presupuesto de defensa británico se encuentra en algún lugar entre los 4.000 y los 20.000 millones de libras". Si bien después hubo algún refuerzo, en el peor de los casos podrían sobrar apenas unos 5.500 millones para inversiones (en realidad incluso menos).
 
Los proyectos son ambiciosos pero criticados hasta por los propios británicos: ciberdefensa, inteligencia artificial, armas hipersónicas, espaciales, robots, continuación de los nuevos SSBN... entre tanto y para empezar Londres dará de baja dos fragatas Type 23 y - en los próximos 10 años - una gran cantidad de efectivos del ejército Británico, unos 10.000. También se están yendo de baja los submarinos Clase Trafalagar y serán dados de baja cazaminas, barreminas y buques auxiliares. La lista no es completa. Es cierto, lo de las fragatas Type 23 es un mero blanqueo, la canibalización en estas naves alcanza niveles alarmantes. Claro, hay proyectos para nuevas naves de escolta (algunos están en marcha) pero mientras tanto la Royal Navy quedará con sólo 17 de las mismas, seis de las cuales son destructores Type 45 con fallas en su planta de poder (aún no totalmente resueltas) y con tremendos problemas de ruido: el ex Director de capacidad operacional del Ministerio de defensa del Reino Unido, el Contraalmirante Chris Parry, afirmó que bajo el agua los buques suenan como "una caja de llaves para tuercas" y sostuvo que los Tipo 45 son "tan ruidosos como el infierno". Son un blanco perfecto para los submarinos. También se reducirá mucho el número de aparatos F-35 que se tenía planeado adquirir... es necesario juntar dinero para el Tempest que entrará en servicio... bueno, no osamos poner una fecha.
 
Lo que permanecerá en servicio y lo que está entrando en servicio tampoco es de la mejor calidad: basta con recordar el historial de accidentes de los submarinos clase Astute y de los diversos problemas de los portaaviones clase Queen Elizabeth. El HMS Prince of Wales está fuera de servicio desde principios de diciembre del año pasado. Como solemos decir, el equipamiento para la Defensa del Reino Unido responde más a las necesidades de la industria del reino que a sus necesidades de Defensa. No estamos ante una excepción.
 

LONDRES PREPARA NUEVOS RECORTES EN EL APARATO MILITAR BRITÁNICO

06.09.2020 08:50
 
Como resultado de la Revisión Estratégica de la Defensa y de la Seguridad (SDSR, por sus siglas en inglés) del año 2010 - que los británicos aprovecharon para sanear sus finanzas - Londres ordenó desguazar las cuatro fragatas tipo 22 de la Marina Real. También fueron cortados en rodajas los aviones Nimrod. El Nimrod MRA4 fue un proyecto de avión de patrulla marítima y ataque que debió haber reemplazado a los Hawker Siddeley Nimrod MR2 que se encontraban en servicio en la Royal Air Force. Se trataba de aeronaves Nimrod MR2 reconstruidas, que podrían así extender la vida operativa del sistema durante varias décadas. El proyecto fue cancelado cuando ya estaba en marcha. No fue todo, un buque de asalto fue suspendido del servicio activo, el portaaviones Ark Royal fue retirado del servicio y la flota de aviones Harrier fue vendida. Gran Bretaña vendió a los norteamericanos 72 aviones Harrier por 110 millones de libras. En los años previos a la venta, las aeronaves habían sido objeto de mejoras y modernizaciones a un costo de 500 millones de libras y uno de sus sistemas de armas había sido modernizado a un costo de 100 millones de libras. La SDSR 2010 también decidió que los destructores Tipo 45 a ser construidos serían la mitad de los que se había previsto con anterioridad a la misma y se vendieron algunas fragatas Tipo 23.
 
Muy pronto comenzamos a decir que la historia podría repetirse. Los proyectos británicos para la Defensa privilegian a su industria, no a su Defensa. El rojo financiero fue creciendo hasta alcanzar niveles alarmantes y ahora Londres están preparando nuevos recortes. Serán decididos el año próximo pero los medios, en particular los especializados, ya comenzaron a analizar las diferentes opciones. Los dos portaaviones Clase Queen Elizabeth corren el riesgo de ser dados de baja con destino incierto. Los tres submarinos Clase Astute que aún no fueron terminados, podrían no serlo nunca. Se comprarían la mitad de los F-35B que se había previsto. Podría reducirse el número de fragatas Type 26 a ser construidas. Podrían eliminarse todos los tanques principales de batalla del Ejército Británico. Podrían desaparecer las unidades de los Royal Marines y podría reducirse aún más el número de efectivo del British Army. Podrían no incorporarse buques logísticos para material sólido. Claro que es altamente improbable que todo eso suceda al mismo tiempo, pero deberán tomarse (al menos en forma parcial) algunas de esas medidas para evitar el colapso financiero de las arcas de la Defensa británica. 
 
Portaaviones británico HMS Ark Royal, dado de baja tras la SDSR del 2010 - Foto: POA(Phot) Jonathan Hamlet/MOD Este archivo tiene licencia de Open Government Licence versión 1.0 (OGL v1.) nationalarchives.gov.uk/doc/open-government-licence/version/1/  (La imagen original fue redimensionada)
 
 
Hasta los defensores más acérrimos de los portaaviones Clase Queen Elizabeth empiezan a admitir que los mismos están muy alto en la lista de material prescindible. La construcción de los nuevos SSBN insume cantidades estrafalarias de dinero y los británicos parecen obsesionados por conservar la capacidad de destruir una ciudad del tamaño de Moscú por sus propios medios. En fin... Ni uno ni otro sistema de armas tiene sentido hoy en día, máxime si realmente se decide reducir el número de aparatos F-35 a ser adquiridos a 70 unidades. Los submarinos Clase Asute tienen diversos problemas de diseño y construcción. Ya se está hablando de una nueva clase de submarinos de ataque para sustituirlos o al menos complementarlos. Los F-35B son caros y la Royal Air Force (RAF) necesita dinero para el desarrollo del caza de sexta generación Tempest. Este es un proyecto de muy alto riesgo que podría dejar a los británicos sin el pan y sin la torta y que generará roces con la Marina Real. Setenta aeronaves para un grupo de batalla de portaaviones suena a muy poco, no alcanzarían para reemplazar eventuales bajas o al menos eso es lo que muchos postulan.
 
Los británicos gastan mucho dinero en Defensa pero lo hacen mal. Las consecuencias de tal actitud en un mundo inestable pueden ser graves. La Historia nos da sobradas pruebas de ello y los propios argentinos hemos logrado ponerlo en evidencia. Fue allá por el año 1982...   
 

LA OTAN PIERDE EL CONTROL DE BUENA PARTE DEL ATLÁNTICO NORTE (ÚLTIMA PARTE)

23.08.2020 11:57
 
La suma de los submarinos rusos y chinos supera en aproximadamente un 60% a la suma de submarinos estadounidenses y británicos. Seguramente los submarinos estadounidenses superan en calidad a los de sus antagonistas pero eso no es suficiente. Es cierto, si sumamos los portaaviones estadounidenses y británicos los mismos casi decuplican a la suma de los chinos y del portaaviones ruso, pero son los propios líderes militares estadounidenses los que se están replanteando el verdadero valor de este tipo de naves. En el Reino Unido, el Jefe de Asesores del Primer Ministro Johnson es un enemigo acérrimo de estas naves. Los portaaviones británicos son blancos fáciles, un símbolo de un poder imperial cuya "gloria" terminó de apagarse en la gélidas aguas del Atlántico Sur.
 
La debilidad de la OTAN no es solo militar sino también (y tal vez principalmente) política. La organización está atravesando situaciones complejas. La compra por parte de Turquía de misiles rusos S-400 Triumf con la consiguiente reacción de parte del gobierno estadounidense, el conflicto greco-turco que se manifestó recientemente, la crisis franco-británica ante la avalancha de migrantes a través del Canal de la Mancha, la obstinada postura de Angela Merkel que se niega a hace una mayor inversión en materia de Defensa y la alocada idea de la creación de un Ejército Europeo que incluya a los Estados Unidos como uno de sus potenciales enemigos, minan la alianza militar que supo lograr que la Guerra Fría no dejara secuelas aún peores de las que dejó.
 
Submarino ruso de misiles de crucero perteneciente a la Clase Oscar - Foto: Mil.ru
 
Quiérase o no, el mundo sigue dividido en Oriente y Occidente. El problema es que el Occidente está siendo sistemáticamente atacado y debilitado. En algún sentido Donald Trump lo entiende así: acotó la guerra contra el terrorismo (que por momentos genera más terroristas de los que neutraliza) y se decidió a fortalecer la economía de su país, la cual se volvió menos dependiente de los chinos. Ciertas actitudes le valieron la enemistad de izquierdistas y liberales, por momentos una especie de cómplices del debilitamiento interno de los Estados Unidos de Norteamérica.
 
La OTAN debe ser rescatada y fortalecida, la pregunta es si eso todavía es posible. Ciertamente una paz basada en un equilibrio militar no es la más deseable pero parece ser la única posible hasta que logremos comprender la insensatez de tal postura. Claro, de por medio hay demasiados beneficiados con el constante conflicto. En su libro "Meeting at Potsdam" (M. Evans & Company, Inc. - 1975), Charles L. Mee Jr. afirma que al final de la Segunda Guerra Mundial americanos y rusos se esmeraron mucho en preservar el mundo del "riesgo de la paz". El problema es que uno de los bandos está cayendo presa de la comodidad, de la corrupción, de la propia estupidez. Del otro lado hay regímenes totalitarios que destinan muchos recursos a fortalecer su dominio. Avanzan rápido y casi en silencio.
 
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EL MÁS NUEVO DE LOS BUQUES DE LA ROYAL NAVY NO LOGRÓ LLEGAR A LA ZONA DE SU PRIMER DESPLIEGUE OPERACIONAL POR PROBLEMAS DE PROPULSIÓN

16.08.2020 10:34
 
Cuando hablamos de los problemas de diseño y construcción de diferentes naves de superficie y submarinos británicos, se podrá pensar que exageramos. No es así y un nuevo hecho sustenta nuestras afirmaciones. El más nuevo de los buque de la Royal Navy, el patrullero HMS Trent, sufrió un grave desperfecto técnico - aparentemente un problema de motor - que lo obligó a volver a puerto a los nueve días de iniciado su viaje inaugural. La nave debió pedir la ayuda de remolcadores para poder entrar al puerto de Gibraltar.
 
Patrullero HMS Trent de la Marina Real británica - Este archivo tiene licencia de Open Government Licence versión 1.0 (OGL v1.)  nationalarchives.gov.uk/doc/open-government-licence/version/1/ (La imagen original fue redimensionada)
 
 
El HMS Trent es un patrullero de 2.000 toneladas del Lote 2 de la Clase River, construido por BAE Systems en Clyde, Escocia. El Ministerio de Defensa británico (MoD) declaró que las naves del Lote 2 pueden utilizarse tanto para tareas de policía como para "operaciones de lucha contra el terrorismo, la piratería y el contrabando". Según BAE Systems, los buques están diseñados para desplegarse a nivel mundial. El Trent está armado con un cañón DS30B de 30 mm, 2  ametralladoras de uso general y 2 Miniguns.
 
El acero que marcó el inicio de la construcción de Trent fue cortado el 7 de octubre de 2015 en el astillero BAE Systems Govan, en Glasgow . El HMS Trent fue bautizado oficialmente el 13 de marzo del 2018, completando sus primeras pruebas en el mar en junio del año siguiente. Hizo su primera entrada en el puerto de Portsmouth el 19 de diciembre de 2019 y fue comisionado el 3 de agosto del corriente año. Inmediatamente fue enviado al Mediterráneo para la Operación Sea Guardian de la OTAN. No llegó.
 

LA OTAN PIERDE EL CONTROL DE BUENA PARTE DEL ATLÁNTICO NORTE (NOVENA PARTE)

08.08.2020 18:26
 
Es necesario insistir sobre el tema del debilitamiento militar británico y del virtual COLAPSO DE LA ROYAL NAVY: tras la Segunda Guerra Mundial la Marina Real británica fue desplazada por la Armada de los Estados Unidos como la mayor potencia naval del mundo. Durante la Guerra Fría la Royal Navy (RN) fue transformada principalmente en una fuerza antisubmarina a la caza de submarinos soviéticos, que centró sus actividades en la brecha GIUK. GIUK es un acrónimo militar en inglés de Groenlandia, Islandia y Reino Unido. La brecha es un amplio sector septentrional del Océano Atlántico que tuvo gran importancia estratégica en las dos guerras mundiales y especialmente durante Guerra Fría, por ser zona de contacto entre fuerzas aeronavales y submarinas de la OTAN y de la URSS.
 
Teóricamente, con el colapso de la Unión Soviética la RN ha vuelto a centrarse en operaciones expedicionarias globales. En la práctica también fue muy influenciada por la Guerra de Malvinas. Dicho conflicto obligó a reescribir muchos manuales militares. Diferentes crisis económicas y graves problemas de planificación están llevando a la Marina Real a ser la sombra de lo que alguna vez fue.
 
Hemos mencionado que la flota británica ya está en problemas al punto de que una versión altamente modernizada del torpedo Spearfish no puede ser probada por la escasez de submarinos. Se invirtieron 227 millones de libras esterlinas (más de 250 millones de dólares) y ahora no se puede concretar la entrega del sistema de armas por la imposibilidad de probarlo. La planificación de la defensa británica es desastrosa y se hace en mucho más en función de la industria que de las necesidades militares. Pero todo podría empeorar a niveles catastróficos.
 
El costo de los programas del Reino Unido para reemplazar el sistema de armas nucleares Trident/Vanguard por el Trident/Dreadnought aumentó más de mil millones de libras (unos 1.310 millones de dólares) en un año, según datos emanados del Ministerio de Defensa británico. La mayoría de los incrementos en los costos y los retrasos no tienen ninguna relación con el coronavirus. Así lo informa, por ejemplo, el medio digital escocés theferret.scot. Paradójicamente no es ese sistema de armas el que corre más peligro sino los submarinos de ataque de la Clase Astute. A los costos y retrasos se suman los problemas de diseño y de construcción. Muchos de ellos fueron tratados en nuestro portal. Los últimos ejemplares de la clase podrían quedar sumergidos en un mar de problemas técnicos y financieros. Aparentemente los británicos privilegiarán el programa de los nuevos SSBN por sobre la construcción de los Clase Astute restantes.
 
Submarino de la Clase Trafalgar HMS Turbulent, uno de los ya dados de baja - Foto: LA(Phot) Simmo Simpson/MOD  Este archivo tiene licencia de Open Government Licence versión 1.0 (OGL v1.) nationalarchives.gov.uk/doc/open-government-licence/version/1/  (La imagen original ha sido redimensionada)
 
Ya mencionamos en notas anteriores los muy numerosos problemas e incidentes de los Astute. Para el colmo los Clase Trafalgar que quedan en servicio están llegando al final de su vida operativa. Los destructores Tipo 45 tienen graves problemas de propulsión, las fragatas Type 23 están siendo canibalizadas para mantener al menos parte de las mismas en servicio y están virtualmente desprovistas de misiles antibuques. Dos grandes portaaviones casi sin aeronaves no resuelven la crisis, la agravan. Además los Queen Elizabeth están en la mira del Jefe de Asesores del Primer Ministro Johnson. Por lo pronto el tan anunciado despliegue de uno de estos buques al Mar del Sur de China ya fue puesto en duda. Hay en juego cuestiones políticas pero también cuestiones militares. No se entra a las aguas reclamadas por China con una escolta débil, con pocas aeronaves de combates, sin aeronaves de alerta temprana y con buques de apoyo inadecuados y/o insuficientes.
 
En la RN escasean los tripulantes, en especial los técnicamente más calificados. El año pasado, al principio del despliegue Westlant 19, el destructor tipo 45 HMS Dragon sufrió una pérdida de capacidad de control de aeronaves cuando, por algún motivo, su único controlador de aeronaves debió regresar al Reino Unido. Debió se reemplazado por un tripulante calificado del HMS Queen Elizabeth. A bordo del destructor no había otro tripulante capaz de hacer el trabajo, de hecho el reemplazante no tenía experiencia específica en la tarea que debió asumir. El hecho, publicado por portsmouth.co.uk, es extremadamente elocuente. ¿Qué sucedería si hubiera que desplegar a varios de estos destructores al mismo tiempo? La pregunta es retórica, eso sería muy difícil por los problemas de estas naves. El GIUK comienza a parecerse más a un arco de bienvenida que a una brecha. (Continuará)
 
Fuente adicional: Wikipedia
 
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LA OTAN PIERDE EL CONTROL DE BUENA PARTE DEL ATLÁNTICO NORTE (OCTAVA PARTE)

01.08.2020 19:52
 
Tal vez no sean las cuestiones militares sino las políticas las que más deterioran a la OTAN. El Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Donald Trump, mantiene relaciones tensas con el gobierno alemán. Alemania gasta en Defensa un 1,36% de su PBI, muy por debajo del 2% que se pretende que aporten los miembros de la OTAN. Los estadounidenses retirarán casi 12.000 efectivos del país gobernado desde hace tres lustros por Angela Merkel, algunos (algo menos de la mitad) serán desplazados hacia otros países europeos, otros regresarán a Norteamérica. Merkel es, junto al francés Macron, una de las promotoras de la creación de un Ejército Europeo que tendría en su lista de potenciales enemigos a los propios Estados Unidos. Por su planteo descabellado, la idea no tuvo demasiado éxito pero es difícil decir que fue abandonada totalmente. 
 
El desplazamiento de fuerzas estadounidenses se dará de tal forma que podría debilitar el flanco norte de Europa, precisamente el que es analizado en esta serie de artículos. El Presidente Trump tiene sobradas razones para estar decepcionado de Merkel pero su jugada no está exenta de riesgos y podría debilitar aún más la postura de la OTAN en esa zona. Trump postula que Europa debería hacer un mayor esfuerzo por fortalecer su Defensa, en eso tiene razón, habrá que ver cuál será la reacción del Viejo Continente. 
 
Fue la propia Canciller alemana quien abrió las puertas a la inmigración indiscriminada hacia la Unión Europea, provocando la salida de los británicos de esa organización. Además Europa tiene en marcha dos proyectos de caza de sexta generación: uno es la iniciativa (nuevamente) franco-alemana y el otro es el programa británico Tempest. Ambos proyectos correrán serios riesgos económico-financieros si no se fusionan pero eso parece una posibilidad cada vez más remota. En estos párrafos sobre la política y la OTAN también habría que mencionar a Turquía, pero su postura ambigua es de conocimiento público.
 
Submarino ruso de la Clase Kilo Mejorada - Foto: Mil.ru (La imagen original fue reducida en tamaño)
 
Los Estados Unidos tienen sin dudas una marina de guerra  impresionante pero su fuerza de submarinos no es, al menos cuantitativamente, claramente superior a la de los rusos. En ese sentido los rusos siguieron la receta que les permitió ser peligrosos durante toda la Guerra Fría. Es cierto, ni entonces ni ahora la calidad de los submarinos rusos logró inspirar confianza pero - al menos en parte - eso podría estar cambiando. También es cierto que la OTAN realiza frecuentes ejercicios antisubmarinos, como el recientemente finalizado Dynamic Mongoose, que se efectuó frente a las costas de Islandia. Del mismo participaron cinco submarinos pero recordemos que recientemente se reportó la presencia de 10 submarinos rusos en el Atlántico Nororiental. Además los estadounidenses deben hacer frente a la amenaza china. El problema es mayúsculo. Hemos regresado a la Guerra Fría pero ahora el Gigante Asiático es una grave amenaza en sí mismo. Su crecimiento en el campo de las armas, de la tecnología informática y de las comunicaciones es patente, su avance político y económico-financiero en el mundo, también.
 
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LA OTAN PIERDE EL CONTROL DE BUENA PARTE DEL ATLÁNTICO NORTE (SÉPTIMA PARTE)

25.07.2020 20:54
 
Recientemente hemos informado de la aparición de algunos artículos que ponían de manifiesto debilidades de la Armada de Rusia en materia de mantenimiento y adiestramiento. La marina de guerra rusa puede no estar en condiciones óptimas pero dista mucho de ser débil, por el contrario, parece estar fortaleciéndose. Así esta semana fue formalmente aceptada en dicha marina la fragata Admiral Kasatonov. La Kasatonov es la segunda nave del Projecto 22350 o Clase Admiral Gorshkov, un esfuerzo por volver a construir grandes barcos capaces de operar en zonas marítimas distantes. El proyecto prevé la construcción de ocho de estos buques fuertemente armados, cuyo desplazamiento a plena carga es de unas 5.200 toneladas. Algunas fuentes afirman que el número final de naves será mucho mayor.
 
Cuando hablamos del fortalecimiento del poder naval ruso lo hacemos en base a datos concretos. Esta semana se realizó oficialmente la puesta de la quilla de seis naves de guerra. Se trata de dos fragatas de la arriba mencionada Clase Admiral Gorshkov, de dos buques de desembarco y de dos submarinos de ataque (SSN) Yasen-M.
 
Claro, los seis buques aún deben ser construidos pero lamentablemente la amenaza rusa es real. En un artículo del mes de mayo del corriente año dábamos cuenta de que se había informado la presencia simultánea de 10 submarinos rusos en el Ártico y el Mar del Norte (Barents Observer). Esta semana se informó la presencia de un submarino ruso en el Canal de la Mancha. Se trataría de una nave de la Clase Kilo, el Krasnodar. El sumergible ruso estaría navegando hacia el Báltico pero el problema es que por momentos los británicos le habrían perdido el rastro totalmente. Eso es grave. El buque de la Royal Navy que habría estado siguiendo al Clase Kilo sería el HMS Tyne, un patrullero de protección pesquera que ya había sido dado de baja pero que fue reactivado por necesidades surgidas del brexit. 
 
 
Patrullero de la Clase River HMS Tyne 
Foto: LA(Phot) Kyle Heller/MOD - Este archivo tiene licencia de Open Government Licence versión 1.0 (OGL v1.) nationalarchives.gov.uk/doc/open-government-licence/version/1/   (La imagen original fue redimensionada)
 
El Krasnodar no es el único submarino ruso que pudo ser observado en superficie en las últimas semanas. El sitio hisutton.com informa que el submarino de misiones especiales Podmoskovye zarpó de su base (supuestamente secreta) de Olenya Guba, con la ayuda de dos remolcadores. El Podmoskovye es una nave de misiles balísticos que fue transformada para ser buque madre de submarinos menores capaces de cumplir tareas de búsqueda y rescate, investigación científica e inteligencia. 
 
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LA OTAN PIERDE EL CONTROL DE BUENA PARTE DEL ATLÁNTICO NORTE (SEXTA PARTE)

19.07.2020 16:25
 
Últimamente han aparecido algunos artículos poniendo de manifiesto algunas debilidades de la Armada de Rusia, citándose cuestiones de mantenimiento y adiestramiento. Es difícil conocer el estado material detallado de la marina de guerra del país gobernado por el ex agente de la KGB Vladimir Putin. Podemos suponer que no todo está en condiciones óptimas, probablemente esté lejos de eso, pero tratar de profundizar mucho es bastante difícil. Sí podemos afirmar que en el bando opuesto no todo es tan bueno como puede parecer a primera vista. Ya hemos hablado sobre algunas debilidades de la Defensa británica en general y de la Marina Real en particular. En la últimas semanas aparecieron otras noticias alarmantes.
 
En nuestro portal hemos hecho alusión al por demás precario estado financiero de la Defensa del Reino Unido, agravado por la pandemia que es de público conocimiento. Lo cierto es que el deterioro económico que generó obligará a los británicos a hacer nuevos recortes y ya se está hablando muy seriamente de dejar sin efecto el programa de buques logísticos para material sólido, de la posible baja de buques de asalto anfibio y de nuevos recortes de personal en el ya de por sí reducidísimo Ejército Británico, entre otros. A menudo, claro, la pandemia está siendo usada como excusa para recortes que eran inevitables mucho antes de la misma. Venimos señalando la necesidad de los mismos desde hace tiempo.
 
La flota británica ya está en problemas al punto de que una versión altamente modernizada del torpedo Spearfish no puede ser probada por la escasez de submarinos. La actualización incluye una nueva ojiva, un cambio en el sistema de combustible para mejorar la seguridad, la digitalización completa del arma y un nuevo enlace de la guía de fibra óptica para mejorar el rendimiento. Se invirtieron 227 millones de libras esterlinas (más de 250 millones de dólares) y ahora no se puede concretar la entrega del sistema de armas por la imposibilidad de probarlo. La planificación de la defensa británica es desastrosa y se hace en mucho más en función de la industria que de las necesidades militares.
 
Submarino de ataque HMS Astute - La presente imgen es de dominio público por decisión de su autor, PoorTom
 
En lo que hace a la deficiente preparación y la constante sobreexigencia del personal de la Royal Navy, sobran ejemplos. Nuevamente los submarinistas son los más perjudicados. Estos días trascendió una cuasicolisión entre un ferry de pasajeros y un submarino de la Clase Vanguard ocurrida en el 2018. El 6 de noviembre del 2018, el oficial de vigilancia del ferry tuvo que tomar medidas urgentes para evitar un submarino Clase Vanguard después de que su periscopio fuera visto muy cerca del ferry. Al parecer no toda la culpa fue de los submarinistas. Los sistemas del SSBN suministraron información de dudosa precisión, por no decir manifiestamente errónea. Tampoco hay que olvidar la encalladura del HMS Astute del 2010; la colisión con "témpanos" del HMS Talent en el 2014 y la colisión del HMS Ambush del 2016. La lista no es completa y estos hechos no son insignificantes. Sobre la flota de superficie británica ya hemos escrito bastante.
 
Sin lugar a dudas las condiciones del material estadounidense son mucho mejores, pero aún ahí hay problemas. Estos días el buque de asalto anfibio de la Clase Wasp USS Bonhomme Richard (LHD-6) ardió durante cinco jornadas antes de que lograra apagarse el incendio que estallara a bordo. La USAF, por su parte, ya perdió al menos seis aviones de combate en los últimos ocho meses. Todos se accidentaron durante misiones de entrenamiento. Eso incluye un F-35A y un F-22. Los F-35 constituyen una pesadilla logística extremadamente difícil de resolver en el corto y mediano plazo. Según nuestro criterio el programa militar más caro de la historia no está, ni por lejos, a la altura de lo esperado. (Continuará)
 
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