Mucho es lo que ya se dijo y lo que se dirá estos días sobre la seguridad de los F-35. Por el momento preferimos no emitir opinión y queremos ofrecer al lector un breve listado de algunos incidentes y accidentes protagonizados por estos cuestionados aparatos.
Uno de los accidentes más graves sufridos por parte de un F-35 tuvo lugar el 23 de junio de 2014 en la Base de la Fuerza Aérea Eglin (USAF) en Florida, Estados Unidos de Norteamérica. Una falla catastrófica del motor obligó a dejar temporalmente en tierra a toda la flota, hecho que retrasó varios meses la campaña de pruebas de vuelo del programa de desarrollo. La aeronave, un F-35A, se estaba preparando para llevar a cabo una misión de entrenamiento cuando se produjo un incendio en la parte trasera del aparato. El fuego quemó los dos tercios posteriores del avión.
Otro incidente serio tuvo lugar el 27 de octubre del año 2016 cuando se produjo un incendio a bordo de un F-35B en pleno vuelo de entrenamiento. El foco ígneo se localizó en el compartimento de armas del aparato. La aeronave aterrizó sin registrarse heridos.
Entre los accidentes más reciente destacamos los siguientes percances: el 22 de agosto del 2018 un aparato sufrió un accidente después de realizar un aterrizaje de emergencia en la base aérea de Eglin en EE. UU.. Habiendo tenido problemas técnicos durante el vuelo (desconocemos la naturaleza de los mismos) el piloto decidió regresa a la base. Al hacerlo el tren delantero de la aeronave colapsó. No hubo heridos pero se especula que el sistema de Puntería Electro Óptica habría sufrido daños de importancia.
Apenas un día después dos aviones de combate de la Marina estadounidense resultaron dañados durante un ejercicio de reabastecimiento aéreo. Uno de ellos fue un F-35C que recibía combustible de un Súper Hornet F/A-18F sobre la costa de Virginia. Los restos de una canastilla de reabastecimiento aéreo fueron ingeridos por el motor Joint Strike Fighter. El avión sufrió daños por al menos dos millones de dólares.
El día 24 de septiembre del 2018 otro F-35 aterrizó en el aeropuerto internacional Fresno Yosemite después de declarar una emergencia en el motor.
El 28 de septiembre, también del año pasado, apenas horas después de conocerse la noticia de la primer misión de combate de un F-35B del Cuerpo de Marines de los Estados Unidos de Norteamérica y la de los primeros aterrizajes de aeronaves F-35B en el portaaviones HMS Queen Elizabeth de la Marina Real británica se conoció otra: un F-35B del US Marine Corps se estrelló en Carolina del Sur. El aparato quedó totalmente destruido y el piloto logró eyectarse.
El 14 de febrero del corriente año un F-35B de la Royal Air Force británica (RAF) basado Marham, en el condado de Norfolk, se declaró en emergencia. El hecho ocurrió durante un vuelo de rutina y la aeronave logró aterrizar después de haber sufrido un inconveniente que fue calificado como menor. Estos incidentes de los F-35B de la RAF serían bastante habituales.
El 9 de abril de este año un aparato F-35A de la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón desapareció del radar sobre el Océano Pacífico durante una misión de entrenamiento junto a otros tres aviones similares. Al parecer también se perdió contacto radial con el avión. Hoy, día 10 de abril, se encontraron restos de la aeronave por lo que se asume que se estrelló, convirtiéndose en la primer aeronave F-35A en sufrir este tipo de accidente. El F-35 había sido ensamblado por la empresa Mitsubishi Heavy Industries. Al momento del cierre de esta nota los restantes doce aparatos en servicio de la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón permanecen en tierra por razones de seguridad, dado que se desconocen los motivos por los cuales la aeronave se precipitó al mar.
El F-35 japonés está siendo intensamente buscado por aeronaves y buques japoneses y estadounidenses ante la posibilidad de que el mismo sea rastreado y eventualmente localizado por los chinos o los rusos.
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